La guitarra de Ígor M. Bery

En el número 11 de la calle Hajdyk Veljkova de Sarajevo vive Ígor Mulamuhic, aunque su nombre artístico es Ígor M. Bery. Tiene 19 años y hasta el comienzo de la guerra era un estudiante del conservatorio de música de Sarajevo. Una mañana de un día cualquiera, con las explosiones de las granadas como música de fondo, Ígor ensaya con su guitarra eléctrica ante la cámara de un equipo del SAGA.Ígor, con una espléndida cola de caballo, tiene un público reducido, pero selecto. Su madre, Irena, actriz -participó en el montaje de Esperando a Godot que realizó Susan Sontag el pasado verano en S...

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En el número 11 de la calle Hajdyk Veljkova de Sarajevo vive Ígor Mulamuhic, aunque su nombre artístico es Ígor M. Bery. Tiene 19 años y hasta el comienzo de la guerra era un estudiante del conservatorio de música de Sarajevo. Una mañana de un día cualquiera, con las explosiones de las granadas como música de fondo, Ígor ensaya con su guitarra eléctrica ante la cámara de un equipo del SAGA.Ígor, con una espléndida cola de caballo, tiene un público reducido, pero selecto. Su madre, Irena, actriz -participó en el montaje de Esperando a Godot que realizó Susan Sontag el pasado verano en Sarajevo -; su padre, antiguo director de publicidad de la televisión de Sarajevo; Jean-Jacques Vergué, director del equipo de rodaje del SAGA; el operador de cámara habitual en las películas del cineasta bosnio Emir Kusturica, el productor, el técnico de sonido, la intérprete, dos perros pequineses y un gato que conviven más apaciblemente que serbios, croatas y musulmanes. Todos siguen con atención las evoluciones de la guitarra, tema del día de Sarajevo, una calle bajo el asedio. La historia se construye alrededor de la música de Ígor, que sólo calla para dar paso a las palabras del guitarrista: "La guerra me ha hecho crecer muy rápido. A tomar por culo la guerra. ¡Sexo, drogas y rock and roll! ". El episodio, ya editado, termina con el sonido de la guitarra de Ígor imitando la caída y explosión de las granadas mientras por la pantalla pasan los créditos.

Más información

Esta peculiar historia será una parte del material del SAGA que se presentará durante tres días en el festival FIPA de Cannes, el próximo mes de enero. El SAGA participó con todos sus medios técnicos y humanos en la organización del Festival de Cine de Sarajevo, el pasado noviembre. Varios de los materiales producidos por el SAGA se han proyectado en festivales de San Francisco, Vancouver, Nueva York, París, Bruselas, Praga, Montreal, y cerraron el último festival de Cannes a invitación de Francis Ford Coppola.

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