La OMS advierte que la juventud es población de alto riesgo de sida

Los 800.000 casos declarados de sida en el mundo o los 21.205 acumulados en España desde 1981 no dan una idea exacta de la magnitud de la epidemia porque sólo reflejan los contagios hace 10 años, en opinión de Michael H. Merson, director ejecutivo del programa global del sida de la Organización Mundial de la Salud (OMS). "No sabemos lo que está pasando ahora", reconoció ayer en Madrid. Su mensaje de prevención fue sólo uno: sexo seguro, dirigido especialmente a los más jóvenes, porque para él "toda la juventud es población de alto riesgo en el sida".

En España el 64% de los casos de...

Los 800.000 casos declarados de sida en el mundo o los 21.205 acumulados en España desde 1981 no dan una idea exacta de la magnitud de la epidemia porque sólo reflejan los contagios hace 10 años, en opinión de Michael H. Merson, director ejecutivo del programa global del sida de la Organización Mundial de la Salud (OMS). "No sabemos lo que está pasando ahora", reconoció ayer en Madrid. Su mensaje de prevención fue sólo uno: sexo seguro, dirigido especialmente a los más jóvenes, porque para él "toda la juventud es población de alto riesgo en el sida".

En España el 64% de los casos de sida acumulados tienen estrecha relación con los adictos a drogas a través de jeringuillas. Pero en los últimos datos ofrecidos por el Plan Nacional sobre el Sida, el contagio heterosexual crece alarmantemente. Mientras que en 1981 esta práctica de riesgo afectaba al 1,5% de los casos, entre enero y septiembre dé 1993 ya supone el origen de la infección en un 10,5% de los casi 2.000 nuevos enfermos registrados. El dato apoya el temor expresado por Merson de una rápida expansión social de la infección como ya ha ocurrido en otros países.España sigue siendo el país europeo con mayor número de casos nuevos cada año y de enfermos de sida por millón de habitantes (544,29) "Hasta el momento se asocia a población drogadicta", advirtió Merson una y otra vez en un encuentro con periodistas organizado por el Plan Nacional sobre el Sida. "Me parece que en España estamos en un momento importante de la epidemia para no pasar a una situación peor y que se expanda de grupos de riesgo a la población general. Y, por supuesto, puede pasar".

"En los países del sur de Europa", prosiguió Merson, "estamos lejos de tener la epidemia controlada. Es verdad que predominantemente se da entre drogadictos, pero cuando esto se produce siempre hay que esperar además transmisión heterosexual".

Condones y jeringuillas

A Michael Merson le preocupa cualquiera que tenga más de una pareja sexual y no tome medidas para practicar sexo seguro. "Y la mujer tiene una especial vulnerabilidad, el doble de riesgo que el hombre", dijo. Cuando este responsable de la lucha global contra el sida escucha argumentos que relacionan el uso de preservativos o el reparto de jeringuillas con un estímulo del sexo y de la drogadicción su respuesta siempre es un tajante: "No, no y no",. "si evitas el intercambio de jeringuillas no sólo no aumentas el problema de las drogas sino que disminuyes el riesgo de sida entre drogadictos; y si hablas del sida en las escuelas consigues que los jóvenes tengan un sexo más responsable; y si hablas del condón consigues un sexo más seguro".El contagio a través de transfusiones representa hoy un 5% de todos los casos de sida en el mundo. En opinión de Merson, a pesar del escándalo del plasma contaminado en Alemania, "la sangre ya no es una forma de transmisión del sida en ninguna parte del mundo".

El Plan Nacional sobre el Sida, cuyo secretario general es desde hace pocos meses Carlos Artuondo, ha preparado toda una serie de actos para el próximo día 1 de diciembre con motivo del Día Mundial del Sida. Entre ellos una exposición itinerante de 25 autores plásticos españoles y el estreno por primera vez en Europa de la película En el filo de la duda. Se trata de una adaptación de la novela de Randy Shilts sobre los primeros años del estallido del sida, en la que participan Richard Gere, Phil Collins y Anjelica Huston.

Los beneficios de todas estas actividades se destinarán a la financiación de los programas de lucha contra el sida. El Plan Nacional se propone mejorar el sistema de registro de los casos y reforzar la vigilancia epidemiológica de la enfermedad, lo que unido a la nueva definición de sida que entrará en vigor en 1994, el número de casos de sida puede aumentar un 20%.