CRISIS DE ESTADO EN RUSIA

Abolida la censura en los medios de comunicación de Moscú

El presidente de Rusia, Borís Yeltsin, se vio obligado ayer a abolir la censura en los medios de comunicación moscovitas, que introdujo con el estado de excepción y que causó gran alarma entre los propios partidarios del líder del Kremlin. La situación no ha cambiado, sin embargo, para los periódicos de la oposición comunista y nacionalista que fueron suprimidos. El responsable de la censura ejercida hasta ayer fue Vladímir Solodín, un profesional veterano que en la época de Nikita Jruschov intentó evitar la aparición de Un día en la vida de Iván Denisovich, de Alexandr Solzhenitsin, pu...

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El presidente de Rusia, Borís Yeltsin, se vio obligado ayer a abolir la censura en los medios de comunicación moscovitas, que introdujo con el estado de excepción y que causó gran alarma entre los propios partidarios del líder del Kremlin. La situación no ha cambiado, sin embargo, para los periódicos de la oposición comunista y nacionalista que fueron suprimidos. El responsable de la censura ejercida hasta ayer fue Vladímir Solodín, un profesional veterano que en la época de Nikita Jruschov intentó evitar la aparición de Un día en la vida de Iván Denisovich, de Alexandr Solzhenitsin, publicado en 1962.El secretario de prensa presidencial, Viacheslav Kóstikov, mintió ayer al afirmar que el presidente nunca ordenó la introducción de la censura. Kóstikov dijo que no se prevé ninguna restricción informativa, y que algunas medidas tomadas han sido el resultado de la ley sobre el estado de excepción y son temporales.

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En su decreto del 3 de octubre, Yeltsin invocaba claramente la aplicación de un punto de la ley del estado de excepción en el que se contemplaba la censura previa y la confiscación de materiales impresos, de megáfonos y fotocopiadoras. Al margen de los diarios de la oposición prohibidos, el lunes y el martes otros periódicos, como Segodnia y Nezavisimaia Gazeta, salieron con espacios en blanco en lugar de los artículos censurados. Se da la circunstancia de que Segodnia es financiado por el grupo bancario Most, una de las nuevas estructuras económicas que más apoyan al presidente.

La censura ha hecho reaparecer a veteranos del régimen soviético. Bajo la dirección de Solodín comenzó a actuar el lunes un equipo de 20 profesionales, de los cuales 10 eran censores militares. Su actuación sin criterios claros ha despertado cierta hilaridad.

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