UGT y CC OO aceptan negociar el pacto social

Felipe González se compromete a defender el proyecto de ley de huelga y a mantener la protección social

Menos de dos horas necesitaron ayer Felipe González, presidente del Gobierno en funciones, y los líderes de UGT y CC OO, Nicolás Redondo y Antonio Gutiérrez, respectivamente, para ponerse de acuerdo en que es necesario un gran pacto por el empleo, de dos o tres años de vigencia, para afrontar la grave crisis económica y el aumento alarmante del paro. La negociación real empezará en la última decena de este mes. Aunque ayer no se entró en muchos detalles, los líderes sindicales salieron confiados de La Moncloa, porque el presidente se comprometió a mantener los gastos de protección social y a d...

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Menos de dos horas necesitaron ayer Felipe González, presidente del Gobierno en funciones, y los líderes de UGT y CC OO, Nicolás Redondo y Antonio Gutiérrez, respectivamente, para ponerse de acuerdo en que es necesario un gran pacto por el empleo, de dos o tres años de vigencia, para afrontar la grave crisis económica y el aumento alarmante del paro. La negociación real empezará en la última decena de este mes. Aunque ayer no se entró en muchos detalles, los líderes sindicales salieron confiados de La Moncloa, porque el presidente se comprometió a mantener los gastos de protección social y a defender el proyecto de ley de huelga pactado entre el PSOE y las centrales, cuya tramitación parlamentaria se vio interrumpida por la convocatoria de elecciones.

Redondo y Gutiérrez afirmaron que el acuerdo sigue siendo dificil, pero reconocieron que el panorama es más alentador tras su encuentro con González. Éste se entrevistó por la tarde con el presidente de la patronal CEOE, José María Cuevas, quien rehusó comentar la entrevista.El diálogo social continuará cuando esté constituido el nuevo Gobierno, y en los últimos días de julio, los sindicatos y el Ejecutivo mantendrán un nuevo encuentro. También entonces el Gobierno enviará los primeros papeles con el temario de discusión.

González adelantó a Redondo y Gutiérrez que pretende que el diálogo verse sobre cinco grandes materias: los objetivos de la convergencia europea, algunos aspectos de los Presupuestos Generales de 1994 que pueden influir en la creación de empleo, la reforma de los servicios con un impacto en la inflación, las rentas salariales y empresariales y la reforma del mercado de trabajo. Los sindicatos quieren añadir a esas materias la discusión de la política social y un nuevo marco de política industrial.

Ayer se despejó por fin una incógnita sobre la polémica ley de huelga. El presidente del Gobierno aseguró a Gutiérrez y Redondo que "se está haciendo tremendismo" con esa norma. El propósito de González es enviar el texto tal como quedó bloqueado en el Senado por el adelanto de las elecciones generales. Eso se hará en uno de los primeros Consejos de Ministros del nuevo Gobierno, que lo remitirá al Consejo Económico y Social (CES) y al Consejo de Estado -trámites preceptivos, pero no vinculantes-, y posteriormente al Parlarmento.

El presidente del Gobierno en funciones también se comprometió ayer a defender ese texto con los partidos nacionalistas y a explicar su constitucionalidad. Esa afirmación de González, unida a la de que no va a recortar los gastos de protección social,son "palabras que suenan bien", según explicó a los periodistas Nicolás Redondo.

Menos recelos

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El líder de UGT no disimuló ayer que salía de su encuentro con González con menos recelo y desconfianza que en anteriores procesos fallidos de concertación. Al término de la reunión, manifestó: "Estamos dispuestos a arrimar el hombro y a buscar soluciones positivas, siempre que sean equitativas y eficaces". Y desveló un dato estremecedor aportado por el presidente del Gobierno: "Cada nuevo parado supone un millón de pesetas de gasto adicional".Pero tanto Redondo como Gutiérrez pidieron cautela para no generar falsas expectativas sobre el futuro diálogo. El secretario general de CC OO aseguró que "este país tiene que saber que los problemas son difíciles, y las soluciones, también". Ambos pidieron que la negociación del pacto político "no deje sólo las migajas para el pacto social" y se sintieron tranquilizados al oír de González que tan importante es un acuerdo como el otro.

Gutiérrez insistió en que los acuerdos para formar Gobierno no deben hurtar aspectos sociales ni delimitarlos, pues de esa forma "se condicionaría el alcance de la negociación". Y añadió: "Esperamos que cuando empecemos a negociar no esté todo el pescado vendido en otros escenarios". El Consejo Confederal de CC OO debatirá hoy y mañana la viabilidad del pacto social de acuerdo con las propuestas de González.

El jefe del Ejecutivo no hizo declaraciones a la prensa tras este encuentro, pero el subsecretario del Ministerio del Portavoz, Miguel Gil, dijo que la reunión había sido positiva y que habían encontrado "una actitud constructiva" de los líderes sindicales ante la propuesta del Gobierno para negociar un pacto por el empleo.

Tan sólo corrigió una afirmación de los líderes sindicales. El Gobierno no piensa que "los objetivos nominales del plan de convergencia con la CE hayan saltado por los aires", tal como había afirmado previamente Gutiérrez. El subsecretario del Ministerio del Portavoz aseguró que, para el jefe del Ejecutivo, el encuentro era "un primer contacto y la expresión de su deseo de abrir el diálogo con los interlocutores sociales a la mayor brevedad, dada la situación económica y de desempleo".

Negociar este mes

Felipe González propone ese pacto social por el empleo como el instrumento más adecuado para la solución de la crisis económica. La intención del presidente en funciones es mantener un nuevo encuentro con los agentes sociales una vez se haya celebrado la sesión de investidura, se haya formado el nuevo Gobierno y haya regresado de Brasil, donde asistirá a la III Cumbre Iberoamericana entre los días 14 y 17 de julio.Gil confirmó que el nuevo Gobierno quiere tratar aspectos de los Presupuestos Generales de 1994 con sindicatos y patronal, y que los presupuestos se van a presentar en los plazos legales. Los dirigentes sindicales están en buena disposición, sobre todo para discutir los capítulos relacionados con la protección social, las pensiones o la cobertura a los parados.

Sobre la reforma del mercado de trabajo, ayer se concretó muy poco, pero, ante las reservas de las centrales sobre la propuesta enviada por el Gobierno al Consejo Económico y Social, González afirmó que se trata de un documento más. Por ello, UGT y CC OO van a acelerar el encargo a un grupo de expertos para que les elabore un texto alternativo.

El Gobierno encuentra en la CEOE "una actitud constructiva"

La junta directiva de la patronal CEOE inicia hoy el debate para elaborar propuestas ante el inminente diálogo social, y para ello contará con información caliente sobre los criterios del presidente del Gobierno en funciones.Felipe González se los comunicó en la tarde de ayer al presidente de CEOE, José María Cuevas, y al presidente de CEPYME (organización de pequeñas y medianas empresas de CEOE), Manuel Otero Luna, en un encuentro cuyo resultado no quisieron valorar los dirigentes patronales hasta que hoy informen a su junta directiva.

Miguel Gil, subsecretario del Ministerio del Portavoz, afirmó que el Gobierno ha encontrado en los representantes empresariales "una actitud constructiva" y "disposición" para empezar a trabajar.

En la hora y media de entrevista, González hizo a Cuevas y Otero Luna un planteamiento muy similar al presentado a los sindicatos por la mañana: negociar un gran acuerdo que remedie la grave situación económica y el principal problema del país, que, es el desempleo. También les dijo que es necesaria una responsabilidad compartida de todos los agentes sociales, empezando por el propio Gobierno, y concertó con ellos un nuevo encuentro para finales de mes.

Sobre la ley de huelga, les reiteró que en uno de los primeros Consejos de Ministros del nuevo Gabinete se decidirá remitir al Consejo Económico y Social el proyecto tal como quedó paralizado en el Senado por la convocatoria de elecciones. Gil afirmó que la posición de la CEOE es conocida, y "es en el CES donde puede expresar sus opiniones" sobre este proyecto de ley.

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