El tele-pedido

La Federación de Cámaras del Libro y la Federación de Gremios de Editores están poniendo en marcha un proyecto que necesita la cooperación de editores, libreros y distribuidores: la creación de un sistema de tele-pedido, una gran red informática que conectaría a cualquier librero, a través de un terminal de ordenador, con una enorme base de datos que contendría todos los títulos vivos que se encuentran en el mercado. Este sistema lleva muchos años funcionando en otros países, como Alemania, Finlandia o Estados Unidos."Es una necesidad para el sector editorial. Lo más importante es crear una ba...

La Federación de Cámaras del Libro y la Federación de Gremios de Editores están poniendo en marcha un proyecto que necesita la cooperación de editores, libreros y distribuidores: la creación de un sistema de tele-pedido, una gran red informática que conectaría a cualquier librero, a través de un terminal de ordenador, con una enorme base de datos que contendría todos los títulos vivos que se encuentran en el mercado. Este sistema lleva muchos años funcionando en otros países, como Alemania, Finlandia o Estados Unidos."Es una necesidad para el sector editorial. Lo más importante es crear una base de datos actualizada, con los títulos, las novedades y los precios. Ese ordenador estaría controlado por una especie de sociedad mixta del sector editorial", señala Fermín Vargas. Las conversaciones entre los tres sectores para implantar el tele-pedido ya han empezado y se busca el apoyo financiero del Ministerio de Cultura y de la Comunidad de Madrid y de la Generalitat catalana. Según sus responsables, el proyecto podía estar encauzado entre septiembre y octubre. "El sistema es barato, tecnológica mente viable y, además, existe y funciona perfectamente en otros países. El ISBN serviría como punto de partida para crear esa gran base de datos, que debería estar pilotada por las asociaciones de libreros, distribuidores y editores", señala Rodolfo González.

Antonio Roche se muestra más escéptico. "Es un proyecto digno de apoyo y uno de los caminos para mejorar la distribución; aunque no sería la solución a todos los problemas de este sector. Las dificultades para ponerlo en marcha están en que requiere grandes inversiones, una gestión muy cualificada y en que llegue a ser viable desde el punto de vista empresarial. Actualizar constantemente la base de datos necesita un es-. fuerzo enorme". El tele-pedido implicaría, a largo plazo, otros cambios en la forma de comercializar el libro: se podrían agrupar los pedidos una o dos veces al día, con los que no sólo sería más fácil solicitar un libro, sino que los ejemplares llegarían antes.