Las "imágenes no vistas" de Bill Viola

El artista norteamericano Bill Viola, de 41 años, uno de los pioneros del videoarte, inaugura hoy una exposición monográfica en el Museo Nacional Reina Sofía, de Madrid, con siete videoinstalaciones y una selección de sus vídeos de los últimos 15 años. El sueño, la vida, la soledad, la muerte, son algunos temas de sus producciones, presentadas como "imágenes no vistas" que van "más allá de la mirada". "No hago distinciones entre la vida personal y a práctica artística; en mi trabajo se han ido mezclando los dos aspectos", declaró ayer Bill Viola.

Una de las torres de cristal del Museo R...

El artista norteamericano Bill Viola, de 41 años, uno de los pioneros del videoarte, inaugura hoy una exposición monográfica en el Museo Nacional Reina Sofía, de Madrid, con siete videoinstalaciones y una selección de sus vídeos de los últimos 15 años. El sueño, la vida, la soledad, la muerte, son algunos temas de sus producciones, presentadas como "imágenes no vistas" que van "más allá de la mirada". "No hago distinciones entre la vida personal y a práctica artística; en mi trabajo se han ido mezclando los dos aspectos", declaró ayer Bill Viola.

Una de las torres de cristal del Museo Reina Sofía es el soporte de la videoinstalación Sin dejar de rezar, imágenes borradas por el sol y visibles a partir de las 22.30, con el sonido de los versos de Walt Whitman en el español de Borges. El resto de las obras se encuentra en la cuarta planta, en donde destacan los paneles luminosos de El umbral, que pasan noticias del día; los durmientes en siete bidones de agua; el tríptico de Nantes, con un parto de media hora y la agonía de la madre del artista, y el gigantesco espejo que gira con sus imágenes.Viola lleva 23 años en el campo del vídeo. En España, conocedor de san Juan de la Cruz y santa Teresa, ha presentado dos instalaciones y es la primera vez que muestra una amplia producción, realizada el año pasado para esta gira europea. La muestra, hasta el 23 de agosto, tiene como comisaria a Louise Syring y coordinadora a Carlota Álvarez Basso, jefa del departamento de artes audiovisuales del Reina Sofía, en cuyos fondos, almacenadas, se encuentran piezas de Muntadas y Francesc Torres.

"La esencia de mi trabajo se basa en mi propia experiencia y en la relación que se establece con el espectador, a quien le entrego un espacio privado y personal. Como artista de finales del siglo XX, que utiliza el medio de comunicación por excelencia de esta época, es importante llegar al público a través de las exposiciones, de las cintas de vídeo y de las retransmisiones por televsión", dijo Bill Viola.

Sobre el predominio de las instalaciones, Viola señaló a este diario que, siendo un arte de hoy, es el mismo modelo de la vanguardia y del individuo contra la Academia y los burgueses. "Las instalaciones sirven para crear una profunda experiencia porque afectan a tu cuerpo y a tu mente.Son muy significativas en la relación del lugar del hombre en la sociedad porque estamos de nuevo aprendiendo a pensar con nuestros cuerpos y el espectador se integra en la obra de arte". La vida y la muerte aparecen con frecuencia en su obra desde la propia biografía. "Son dos experiencias íntimas y personales y a la vez las más universales porque todo el mundo entra y sale por estas dos puertas".