Noruega empieza sus conversaciones de adhesión a la Comunidad Europea

Ya son cuatro los países en conversaciones con la Comunidad Europea (CE) para su adhesión a la Unión Europea. Noruega fue ayer el último en incorporarse al grupo formado por Austria, Suecia y Finlandia, que iniciaron sus conversaciones el pasado 1 de febrero.La apertura de las conversaciones de adhesión con estos cuatro países fue decidida en el Consejo Europeo de Edimburgo, en el que los jefes de Estado y de Gobierno de los Doce también decidieron que estarían condicionadas a la ratificación definitiva del Tratado de Maastricht por Dinamarca y el Reino Unido.

El representante noruego, ...

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Ya son cuatro los países en conversaciones con la Comunidad Europea (CE) para su adhesión a la Unión Europea. Noruega fue ayer el último en incorporarse al grupo formado por Austria, Suecia y Finlandia, que iniciaron sus conversaciones el pasado 1 de febrero.La apertura de las conversaciones de adhesión con estos cuatro países fue decidida en el Consejo Europeo de Edimburgo, en el que los jefes de Estado y de Gobierno de los Doce también decidieron que estarían condicionadas a la ratificación definitiva del Tratado de Maastricht por Dinamarca y el Reino Unido.

El representante noruego, el ministro de Comercio Exterior Bjorn Thore Godal, aseguró que su país aceptaba todo el acervo comunitario, pero quiso empezar las conversaciones de adhesión de su país sin ambigüedades. Anunció que la regulación de la pesca en sus costas "debe basarse en los acuerdos ya existentes" y defendió "el principio de estabilidad relativa, que debe permanecer como un principio fundamental". Esto significa que Noruega no quiere ceder ni un ápice ante las pretensiones especialmente españolas de ampliar el acceso a sus caladeros.

Thore Godal defendió el mantenimiento de la propiedad y de la gestión del Estado sobre los yacimientos petrolíferos y sostuvo la necesidad de una política agraria y regional especial.

El inicio de las conversaciones, las segundas que realiza Noruega, coincide con una opinión pública claramente decantada en contra de la adhesión a Europa. Noruega rechazó la adhesión en 1972 y cuenta con un fuerte movimiento ciudadano organizado en favor del no en el referéndum que deberá organizar al término de las conversaciones.

Las regiones del norte, las poblaciones pesqueras y agrarias, y genéricamente los sectores más informales y jóvenes cuentan con los mayores niveles de rechazo a la CE. Los sectores sociales vinculados a la industria y a los negocios, los profesionales y universitarios, y los habitantes de las ciudades acomodados son los que registran mayor número de partidarios de la adhesión.

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