Gianni Amelio: "La miseria moral provoca el abuso de los niños"

El cineasta presenta el caso de una niña prostituta por su madre

"La situación de la infancia es mucho más grave de lo que sale a la luz", dice Gianni Amelio, director de Niños robados, película que se estrena en España la semana próxima y con la que ganó el premio del jurado en Cannes y el Premio Félix al mejor filme europeo en 1992. La dura historia de una niña prostituida por su madre plantea otros graves asuntos: por ejemplo, el uso en los medios de comunicación de Imágenes de los niños afectados o, en un plano más general, la miseria moral que conduce al abuso de la infancia.La película narra la detención de la madre y el viaje de la niña de 11 ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

"La situación de la infancia es mucho más grave de lo que sale a la luz", dice Gianni Amelio, director de Niños robados, película que se estrena en España la semana próxima y con la que ganó el premio del jurado en Cannes y el Premio Félix al mejor filme europeo en 1992. La dura historia de una niña prostituida por su madre plantea otros graves asuntos: por ejemplo, el uso en los medios de comunicación de Imágenes de los niños afectados o, en un plano más general, la miseria moral que conduce al abuso de la infancia.La película narra la detención de la madre y el viaje de la niña de 11 años y de su hermano menor a través de Italia, custodiados por un joven oficial de carabineros encargado de entregarlos en una residencia para niños difíciles del sur del país. El oficial tiene 25 años y trabará una amistad poco común con los niños. Los tres días de viaje se con vierten en vacaciones, metidos en una burbuja que los aleja, sobre todo a la niña, de la brusquedad del día después.

"El futuro de los personajes", dice Amelio, "es el retorno al principio. En el día siguiente de la película el carabinero se guramente vuelva a ser uno como los otros, y los dos niños seguramente continúen siendo niños que los adultos no comprenden. Mi pesimismo no es total, porque la historia recoge la magia de esos tres personajes que viajan juntos durante tres días. Es la historia de la magia de un momento".

Esas horas en las que el buen carabinero custodia a los niños llevan a la pantalla una humanidad que contrasta con el deterioro de los paisajes que atraviesan. "Pienso que la miseria moral no es sólo el abuso de la infancia", dice Gianni Amelio, "sino la negación de todo rasgo humano, desde el consumismo a todo aquello que nos hace perder la capacidad de ser personas. Está claro que la madre de la niña cree que es importante que ésta tenga un buen vestido, pero no piensa a qué precio se lo compra. La madre no es la única culpable, sino también toda la sociedad que la lleva a actuar así, en una cadena de problemas que conducen a la degradación total".

Los personajes recorren Italia de Milán a Sicilia. "Italia es toda igual", dice Amelio, "la diferencia es la capacidad de descubrir una Italia sincera, que se puede encontrar tanto en el norte como en el sur. La degradación es constante y hay casos que son los mismos en todas partes. Aunque en Sicilia los personajes tienen la posibilidad de ser sinceros con sus deseos, sobre todo porque en el sur se encuentran sus orígenes, ya que son tres emigrantes que vuelven a su raíz. Es un viaje al contrario, porque normalmente los viajes son del sur al norte".

Niños robados está interpretado por Enrico Lo Verso y los niños Valentina Scalici y Gitíseppe Ieracitano. Amelio dice que es una historia concebida desde la voluntad de hacer "un cine pobre pero sincero, un filme necesario, no como tantos otros".

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Archivado En