Naciones Unidas denuncia que la 'limpieza étnica' prosigue
Las Naciones Unidas denunciaron ayer la continuación de la llamada limpieza étnica contra la población musulmana de Bosnia-Herzegovina.Ron Redmond, portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), dijo que cerca de 2.000 musulmanes habían sido obligados a abandonar sus hogares en Trebinje, una ciudad de 30.000 habitantes ocupada por los serbios, en las pasadas dos semanas.
En esta localidad, situada al Sur, cerca de la costa Adriática, los extremistas serbios han emprendido una campaña para aterrorizar a los musulmanes y a los croatas y obligarles a m...
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Las Naciones Unidas denunciaron ayer la continuación de la llamada limpieza étnica contra la población musulmana de Bosnia-Herzegovina.Ron Redmond, portavoz del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), dijo que cerca de 2.000 musulmanes habían sido obligados a abandonar sus hogares en Trebinje, una ciudad de 30.000 habitantes ocupada por los serbios, en las pasadas dos semanas.
En esta localidad, situada al Sur, cerca de la costa Adriática, los extremistas serbios han emprendido una campaña para aterrorizar a los musulmanes y a los croatas y obligarles a marcharse, dice el portavoz. Para ello queman las mezquitas, hacen amenazas telefónicas y perpetran asaltos a mano armada.
Situación idéntica
Redmond añadió que la situación en la zona de Banja-Luka, al norte de Bosnia, es similar: en esta área los musulmanes con reclutados a la fuerza por las milicias serbias, que les amenazan con retirarles los carnés de identidad. "No es la clase de limpieza étnica violenta a la que nos habíamos acostumbrado. No tenemos noticias de asesinatos ni ejecuciones. Es una técnica más refinada, pero tan efectiva como la otra".
Las acusaciones de reciente limpieza étnica en el sur de Bosnia, en una zona que pasaría a control de los serbios según el plan de paz diseñado por Lord Owen y Cyrus Vance, salieron a la luz la semana pasada durante las conversaciones de Ginebra. El Gobierno de Bosnia, de mayoría musulmana, amenazó con retirarse de las conversaciones y acusó a los rebeldes serbios de haber expulsado a la población no serbia de Trebinje y Bileca. Un funcionario bosnio aseguraba que los serbios estaban "cumpliendo de manera entusiasta con el plan Vance-Owen antes de firmarlo".