Bernaola dedica al género sinfónico su discurso de ingreso en Bellas Artes

El compositor y pedagogo Carmelo Bernaola, de 62 años, dedicó anoche su discurso de entrada en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando a un género musical concreto, el sinfónico. "No sé muy bien por qué, es como si intentara explicar por qué me gustan tanto las lentejas, el caso es que el género sinfónico siempre me ha interesado mucho explicó el compositor antes de pronunciar su discurso, que duró casi una hora y en el que analizó la evolución e importancia de este género.

"No toda la música que se ha escrito para orquesta es sinfónica, ni toda gran música, ha de ser forz...

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El compositor y pedagogo Carmelo Bernaola, de 62 años, dedicó anoche su discurso de entrada en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando a un género musical concreto, el sinfónico. "No sé muy bien por qué, es como si intentara explicar por qué me gustan tanto las lentejas, el caso es que el género sinfónico siempre me ha interesado mucho explicó el compositor antes de pronunciar su discurso, que duró casi una hora y en el que analizó la evolución e importancia de este género.

"No toda la música que se ha escrito para orquesta es sinfónica, ni toda gran música, ha de ser forzosamente sinfónica. Bach por ejemplo, no es un músico sinfónico. Es un género muy específico porque sólo se puede escribir para orquesta", añadió el compositor, que recibió de otro compositor, Luis de Pablo, la tradicional réplica académica.

Entre el público se encontraban el filósofo José Luis Aranguren, los cineastas Antonio Giménez Rico y Antonio Mercero, el diputado del Partido Popular Alberto Ruiz Gallardón, el periodista Luis Carandell, además de los académicos Luis García Berlanga y Narciso Yepes, entre otros.

Nacido en Ochandiano (Vizcaya) en 1929, Carmelo Bernaola -miembro, junto a De Pablo y Cristóbal Halffter, de la llamada generación de 1951- es autor, entre otras obras, de Heterofonías (1965), Superposiciones variables (1967), Relatividades (1971), Sinfonía en do (1974), Ayer... soñé que soñaba (1975), Las siete palabras (1984) y Nos tálgico (1986).

Música y cine

Pero, además de su prestigioso catálogo de música de concierto, en 1962 fue Premio Nacional de Música. Bernaola también pertenece al mundo del cine: en 1988 ganó un Goya por la música del filme Pasodoble. Aunque el compositor cree que mientras hace años la música de las películas se componía para potenciar las imágenes, hoy se hace para ser comercializada en canales paralelos, por lo que tiene poco que ver con el contenido de la historia a la que acompaña.Para Carmelo Bernaola -que se sentará en el mismo escaño que Ernesto Halffter utilizó hasta 1990- es "un honor" entrar en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, "para mí y para cualquier artista", dice el músico vasco, que desde hace años señala el bajo nivel de la pedagogía musical en España y que critica que el gran público actual recibe la música con criterios sonoros desfasados. "Sí no se forma al público, siempre estaremos empezando. Y el español no se habituará nunca a disfrutar y distinguir las obras por su contenido y no por el nombre de su intérprete".

Bernaola, además de tocar durante 30 años el clarinete en la Banda Municipal de Madrid, ha sido profesor de armonía y director del Conservatorio de Vitoria. Y es precisamente la educación musical lo que parece preocuparle más.

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