Crítica

El barniz de Tàpies

La presentación en Bilbao de la exposición de Antoni Tápies (Barcelona, 1923), que con Celebració de la mel propone una visión transversal de su trayectoria artística en los últimos 40 años, adquiere tintes de verdadero acontecimiento, teniendo en cuenta las pocas ocasiones que ha tenido el público de Bilbao de contemplar la obra de una de las personalidades más relevantes del arte español en nuestro siglo.Reunidas bajo la excusa de haber sido elaboradas con un material atípico como es el barniz, el medio centenar de obras expuestas recuperan una corriente subterránea, poco conocida, de...

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La presentación en Bilbao de la exposición de Antoni Tápies (Barcelona, 1923), que con Celebració de la mel propone una visión transversal de su trayectoria artística en los últimos 40 años, adquiere tintes de verdadero acontecimiento, teniendo en cuenta las pocas ocasiones que ha tenido el público de Bilbao de contemplar la obra de una de las personalidades más relevantes del arte español en nuestro siglo.Reunidas bajo la excusa de haber sido elaboradas con un material atípico como es el barniz, el medio centenar de obras expuestas recuperan una corriente subterránea, poco conocida, de la producción del artista. Desde que en 1952 Tápies incorpora el barniz como un material más dentro del proceso de elaboración del cuadro con el paso del tiempo, éste ha llegado a cautivar especialmente al artista.

Antoni Tàpies

Celebració de la mel.Sala Rekalde. Rekalde, 30. Bilbao. Hasta el 3 de diciembre.

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