José Carreras canta en la Plaza Roja de Moscú ante 10.000 personas
El tenor español José Carreras triunfó anoche en un concierto celebrado en la Plaza Roja de Moscú, conocida por sus grandes desfiles militares, pero que en esta ocasión albergó una gala lírica, transmitida en directo para varios países, para conmemorar la transición democrática. El número de asistentes, unas 10.000 personas, fue menor del esperado, debido, fundamentalmente, a las lluvias que precedieron al concierto y al alto precio de las localidades, que en la reventa llegaron a costar hasta 100 dólares (unas 10.000 pesetas), cantidad impensable para los moscovitas.
"Todo ha ido p...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
El tenor español José Carreras triunfó anoche en un concierto celebrado en la Plaza Roja de Moscú, conocida por sus grandes desfiles militares, pero que en esta ocasión albergó una gala lírica, transmitida en directo para varios países, para conmemorar la transición democrática. El número de asistentes, unas 10.000 personas, fue menor del esperado, debido, fundamentalmente, a las lluvias que precedieron al concierto y al alto precio de las localidades, que en la reventa llegaron a costar hasta 100 dólares (unas 10.000 pesetas), cantidad impensable para los moscovitas.
"Todo ha ido perfectamente", aseguró el tenor español después de la actuación, a pesar de que en algunos momentos su voz tuvo que competir contra las campanadas del reloj de la torre Spaskaya del Krémlin. Carreras se mostró "muy contento" por el trato recibido en Moscú y señaló que para él era "un gran honor" estrenar el festival de una semana con el que se celebrará la transición hacia la democracia de Rusia.
El concierto, con un programa de 13 canciones, todas elegidas por el propio tenor, comprendía piezas como Granada, de Agustín Lara, y otras típicamente españolas. Las salvas de aplausos de los asistentes, entre los que se encontraban numerosos extranjeros, sobre todo en las primeras filas, obligaron a Carreras a conceder dos canciones como propina.
Las gradas erigidas en la Plaza Roja ocultaron el mausoleo que alberga la momia del fundador de la extinta URSS, Vladimir Lenin. Durante el concierto, los soldados que custodian el que fuera el sancta santorum del sistema comunista hicieron un discreto cambio de guardia sin ninguna ceremonia.