SNIACE debe más de 1.000 millones por contaminar la cuenca del Besaya

La factoría de SNIACE en Torrelavega debe más de mil millones de pesetas por vertidos a la cuenca del río Besaya (Cantabria), una de las áreas más deterioradas de España. Obras Públicas acusa a esta empresa de dar largas a la solución del problema. Ahora, con SNIACE en suspensión de pagos, el problema se ha convertido en una complicada lucha política, económica y medioambiental entre intereses públicos y privados, el Gobierno de Cantabria y la Administración central. ¿Quién ha de pagar los 8.000 millones que cuesta sanear la zona? Torrelavega que no depura sus aguas, también está envuelta en l...

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La factoría de SNIACE en Torrelavega debe más de mil millones de pesetas por vertidos a la cuenca del río Besaya (Cantabria), una de las áreas más deterioradas de España. Obras Públicas acusa a esta empresa de dar largas a la solución del problema. Ahora, con SNIACE en suspensión de pagos, el problema se ha convertido en una complicada lucha política, económica y medioambiental entre intereses públicos y privados, el Gobierno de Cantabria y la Administración central. ¿Quién ha de pagar los 8.000 millones que cuesta sanear la zona? Torrelavega que no depura sus aguas, también está envuelta en la polémica.

"SNIACE (Sociedad Nacional de Industrias y Aplicaciones de Celulosa Española) tiene que abonar un canon de 525 millones de pesetas al año por vertidos al Besaya, y se niega a pagar un duro", afirma Francisco Gil, director general de Calidad de Aguas del Ministerio de Obras Públicas y Transporte, que tiene apuntada a SNIACE por incumplir todas las normativas sobre depuración. "Vierten cada año nada menos que 35.000 metros cúbicos de unos residuos pestilentes de casi imposible eliminación, las lejías bisulfiticas. Son los principales culpables de las espumas de hasta metro y medio de la playa de Suances. Como respuesta, dan largas".Francisco Gil va más allá en las acusaciones: "El proceso que emplea SNIACE para obtener la pasta de papel es completamente obsoleto; saben que no son competitivos con ninguna industria europea. Pero hasta ahora no he conseguido hablar con nadie de la dirección para que me explique qué van a hacer". Con la suspensión de pagos, la bomba le ha estallado en las manos: "Es el primer caso que se nos presenta. Estaban forzando los mecanismos para su embargo. Ahora hay que esperar".

Vital para Cantabria

Blas Mezquita, director general de SNIACE, confirma que la Confederación Hidrográfica del Norte (organismo que gestiona el cobro del canon de vertidos) figura entre los principales acreedores y que están esperando la aprobación de los proyectos que han presentado para un completo tratamiento de vertidos. "Sólo puedo decir que son proyectos totalmente viables, más comentarios podrían perjudicar la marcha normal de la compañía". SNIACE, cuyo. principal accionista es Banesto, tuvo en 1991 unas pérdidas de 3.700 millones de pesetas. Da empleo a 1.100 personas y su incidencia socioeconómica es considerada vital para Cantabria, pues da salida al eucalipto de la región. En los. ochenta fue uno de los principales caballos de batalla de organizaciones ecologistas como Greenpeace.Francisco Gil explica que los proyectos de SNIACE para el aprovechamiento energético de las lejías bisulfíticas son tan caros (unos 10.000 millones de pesetas) que la empresa no los puede acometer. "No es justo que la Administración cargue con el problema". El Gobierno de Cantabria ha aprovechado esta crisis para la batalla política de la reconversión industrial del Norte. Su presidente, Juan Hormaechea, ha acusado de la situación de SNIACE a la "presión desaforada de la Confederación Hidrográfica del Norte", que ha impedido las inversiones extranjeras. "Pedimos para ella lo mismo que el Gobierno está dispuesto a dar en Asturias".

José Luis Gil, consejero de Medio Ambiente de Cantabria, reconoce la magnitud del problema: "No sólo de SNIACE, también de Torrelavega. No es buen ejemplo que un municipio de 60.000 habitantes no depure sus vertidos. Tras muchas peleas, la crisis de SNIACE puede ser el detonante para llegar a un acuerdo. El saneamiento del Saja y del Besaya cuesta 8.000 millones, la mitad referida a SNIACE".

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