Scaparro considera que Flotats aporta al 'Quijote' su práctica en decir textos clásicos

El director y el actor inician en Barcelona el proceso de montaje del espectáculo

El director Maurizio Scaparro y el actor Josep María Flotats han iniciado en Barcelona el montaje de la versión teatral del Quijote que inaugurará la Expo de Sevilla. La obra tendrá un ensayo general con público en la ciudad andaluza el 20 o 21 de marzo, se presentará en el City Center de Nueva York y viajará a Italia para tener su estreno de gala en Sevilla el 20 de abril. Scaparro concibe su espectáculo como un "homenaje al campeón de la utopía, hecho desde unos tiempos duros para los que creen en la utopía". considera que Flotats aporta a la obra su práctica en decir textos clásicos.
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El director Maurizio Scaparro y el actor Josep María Flotats han iniciado en Barcelona el montaje de la versión teatral del Quijote que inaugurará la Expo de Sevilla. La obra tendrá un ensayo general con público en la ciudad andaluza el 20 o 21 de marzo, se presentará en el City Center de Nueva York y viajará a Italia para tener su estreno de gala en Sevilla el 20 de abril. Scaparro concibe su espectáculo como un "homenaje al campeón de la utopía, hecho desde unos tiempos duros para los que creen en la utopía". considera que Flotats aporta a la obra su práctica en decir textos clásicos.

En el pequeño teatro del centro aragonés de Barcelona, una sala con sabor a teatrito de centro parroquial, que cruje al andar y en la que hace un frío de órdago, Scaparro y Flotats han dispuesto una mesa, unas sillas y unos mínimos elementos que sugieren apenas, en su pobreza, el mundo del Quijote. Hay un sillón, un baúl con unos libros viejos y otro del que sobresalen unas espadas y una pica. "Aún no he incorporado ningún elemento físico del personaje" dice Flotats; "llevaré el pelo blanco, más corto, una perilla y un bigote. Coraza, claro, pero también cosas etéreas, un largo camisón...".. Unos bocetos de figurines permiten asomarse a ese Quijote aún mental. "Toda vía no hemos empezado los en sayos de verdad", señala Scaparro; "haremos algunos de texto aquí, con Juan Echanove [Sancho Panza], y luego iremos a Madrid".El director explica que la presentación en el City Center coincidirá con un seminario sobre Don Quijote y la utopía en la Universidad de Nueva York. Luego irán a Roma, Nápoles y Bolonia, para recalar en Sevilla, donde actuarán hasta el 26 de abril. De la gira posterior hay aún cosas por concretar. Sí es seguro que estarán en el Centro Dramático Nacional de Madrid en junio, y en Barcelona, en el marco del Festival de las Artes, con motivo de los Juegos Olímpicos, en el teatro Tívoli o quizá en el Liceo. El montaje no podrá ser explotado más allá de septiembre, por los compromisos profesionales de Flotats. Se especula con llevarlo a diversas capitales europeas: París, Londres, Praga... Participan en el montaje 15 personas; aparte de Flotats, Echanove y el actor que hará el personaje de director -pendiente de confirmación-, el resto son actores jóvenes poco conocidos. La producción es responsabilidad de Mediterránea 92 "por encargo explícito de la Expo", que aporta un 30% o un 40% del coste del montaje hasta el día de su estreno.

"La novela no se puede reducir, y de eso éramos bien conscientes Rafael Azcona y yo al hacer la adaptación", dice Scaparro; de su aproximación, efectuada hace nueve años y plasmada en un espectáculo, una película y una serie de televisión -siempre con Pino Micol como protagonista-, es bien elocuente el subtítulo del espectáculo: Fragmentos de un discurso teatral. "En el Quijote se explicita muchas veces el amor de Cervantes y el propio don Quijote por el teatro. Es una obra llena de amor por el teatro, que aparece, directa o indirectamente, en múltiples ocasiones". La nueva versión con Flotats -una versión de mayor envergadura, según el director, que durará dos horas, una más que la original- se ha empapado del sentimiento de la época: "Vivimos un momento muy extraño, la caída de las ideologías, que ha privilegiado el mercado como único valor de hoy; son tiempos duros para los caballeros de la utopía, y aquí lo que hacemos es un homenaje al gran campeón de la utopía; reivindicamos los sueños, la fantasía...".

Viejo teatro

La acción de la pieza transcurre en un viejo teatro, un ex teatro, destruido, algo como el Bouffes du Nord de Peter Brook; -allí, una compañía de cómicos -que representa a la humanidad- se encuentra con un personaje en un viejo sillón, con camisa de dormir, al que toman por un loco... "Es curioso que Josep Maria y Pino sean los dos únicos actores con los que he hecho el Cyrano y ahora el Quijote-, medita Scaparro. Con Flotats "habíamos hablado hace tiempo de este proyecto; lo pensamos cuando hicimos el Cyrano en Barcelona en 1985: en el Cyrano, por cierto, se cita el Quijote, es una obra que Rostand conocía bien".Flotats, dice Scaparro, "me da, aunque suene paradójico, el castellano:, me da, en su saber decir los textos clásicos, con su forma de decir de la Comédie, una presencia culta con respecto a la lengua".

Flotats admite que la lengua castellana, que no ha empleado profesionalmente nunca, le es difícil, "pero al tiempo me produce un gran placer físico, disfruto masticándola, como una fruta, como a Racine y Cornellle". El actor se considera próximo a don Quijote: "A mí también, lo que para mucha gente es locura me parece real".

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