Carmen Maura, de prostituta a reina

Carmen Maura se convertirá mañana en la protagonista de la Mostra de Venecia, al menos para los aficionados al cine español, porque se presenta en la sección oficial del certamen la película española Chatarra, dirigida por Félix Rotaeta. La actriz interpreta en el filme a una prostituta que vive con su hija entre los desechos de un barrio industrial. Maura, que vive en París desde el año pasado, prepara allí su salto al cine europeo convirtiéndose en reina, nada menos que en la española Ana de Austria, que fue esposa de Luis XIII.

Carmen Maura vive actualmente en la Rue Vavin, en pleno ...

Carmen Maura se convertirá mañana en la protagonista de la Mostra de Venecia, al menos para los aficionados al cine español, porque se presenta en la sección oficial del certamen la película española Chatarra, dirigida por Félix Rotaeta. La actriz interpreta en el filme a una prostituta que vive con su hija entre los desechos de un barrio industrial. Maura, que vive en París desde el año pasado, prepara allí su salto al cine europeo convirtiéndose en reina, nada menos que en la española Ana de Austria, que fue esposa de Luis XIII.

Carmen Maura vive actualmente en la Rue Vavin, en pleno centro de París, en un apartamento enorme en cuyo balcón el MarIon Brando de El último tango recibiera los balazos de la mano de Maria Schneider. Es un domicilio provisional, en espera del Château de Chambord, al borde del Loira, al que acudirá como Ana de Austria, viuda de Luis XIII y reina de Francia. Entre una y otra, se ha escapado hasta Venecia para presentar Chatarra, película de Félix Rotaeta de la que es protagonista.Huir

"Hago de puta con niña y que va huyendo. De un hombre, claro", añade como si del destino se tratase. "Lo de Chatarra es porque los protagonistas viven en un sitio espantoso, en una ciudad suburbial alrededor de Barcelona, con autopista a nivel de balcón del segundo piso y descampados llenos de chatarra".

"Los personajes", continúa Maura, "también parecemos salidos de una chatarrería. Yo llevo siempre, excepto en la primera secuencia, el pelo teñido de color rojo. Color chatarra, según Félix". La película está producida por Rosa Romero, cuyo anterior trabajo fue la exitosa Boom, boom, y con la que Maura ha fichado por tres películas seguidas. "Lo primero que hice con Rosa fue Chatarra, he seguido con ella en Salto mortal, y ahora vamos de nuevo juntas a contar un poquito de la historia de Francia. Rosa es fantástica. Si Chatarra va a Venecia es gracias a ella, que cogió las latas de la película y se fue en coche a ver al comité seleccionador, ya que si del ministerio de Cultura depende, la película escogida hubiese sido otra".

A Carmen Maura le divierte que los periodistas franceses le pregunten si ella y Almodóvar también son conocidos en España, una prueba más de que no hay como creerse el centro del mundo para lograr serlo. Y la divierte hacer de Ana de Austria -"es mi primera reina"-, después de ser la madre embarazada de un niño que no quiere nacer en Salto mortal, la nueva película de la realizadora holandesa Marion Hansel.

"Como Ana de Austria, mi principal misión es salvar al Luis XIV aún niño de los atentados de los nobles. Soy una española emigrada que ha de ganarse el pan engañando a los que quieren matar a su hijo. Me han casado a los 13 años con un hombre al que no le gustaban demasiado las mujeres, Luis XIII, y que quiso hacerme pasar por estéril. Pero no pudo". El filme, centrado en el periodo de La Fronda, será dirigido por Roger Planchon, un prestigioso hombre de teatro, y es coproducción con Avanti, una empresa española. Se siente muy impresionada por los minuciosos ensayos a los que les somete Planchon, que "se dedica a agitarnos como si fuésemos botellas de espumoso con el tapón puesto hasta el día del rodaje", pero su recuerdo más cariñoso es para Félix, "con el que existe una gran complicidad".

La actriz cree que se lleva bien con los directores "porque están ahí para enamorarse de sus personajes, y es fácil hacerles felices. Cuando está rodando, un director quiere más a su protagonista que a su mujer o sus hijos".

Relaciones

Con Planchon y sus compañeros de reparto la relación será de otro tipo: "La mayoría de los intérpretes son gente de teatro, buenísimos pero poco conocidos. Yo me siento muy a gusto con todos, y sobre todo desde que Planchon me dejó bien claro que no quería una imagen engolada, que para él Ana de Austria era un personaje de comedia, siempre de negro, bajita y rodeada de gigantes, una madre con dos hijos que contribuye muchísimo a consolidar el Estado francés a pesar de que, de vez en cuando, suelte disparates del tipo los franceses son idiotas. Dios es español".