Frente de oposición en el País Vasco a la ley de Extranjería

La mayoría de los partidos y sindicatos vascos se han sumado a la exigencia de la Coordinadora de Organizaciones no Gubernamentales y de treinta movimientos sociales de derogar la actual ley de Extranjería y de amnistiar a la población extranjera radicada en España hasta la publicación de la nueva ley. El manifiesto solicita también que la nueva regulación de los flujos migratorios "sea respetuosa con los Derechos Humanos, la Convención de Ginebra y la Organización Internacional del Trabajo (OIT)".

En menos de una semana instancias políticas, económicas, sociales y eclesiales han al...

La mayoría de los partidos y sindicatos vascos se han sumado a la exigencia de la Coordinadora de Organizaciones no Gubernamentales y de treinta movimientos sociales de derogar la actual ley de Extranjería y de amnistiar a la población extranjera radicada en España hasta la publicación de la nueva ley. El manifiesto solicita también que la nueva regulación de los flujos migratorios "sea respetuosa con los Derechos Humanos, la Convención de Ginebra y la Organización Internacional del Trabajo (OIT)".

En menos de una semana instancias políticas, económicas, sociales y eclesiales han alzado su voz en Euskadi contra la normativa que regula los movimientos migratorios. Los prelados de Bilbao condenaban la semana pasada el racismo por "inhumano", calificaban la normativa sobre inmigración de "severa y rigurosa" y pedían su modificación. En esta ocasión, los firmantes del manifiesto exigen que las diferentes administraciones apoyen "una política discriminatoria positiva" para los afectados.

Todas las formaciones políticas vascas -a excepción de los socialistas y el Partido Popular-, organizaciones sindicales -incluida UGT- y una treintena de movimientos sociales denuncian en el manifiesto las continuas prácticas discriminatorias de que son objeto los hombres y mujeres inmigrantes -incluyendo los legalizados y documentados- que les impiden acceder a derechos sociales y produce situaciones de injusticia y discriminación negativa de este colectivo".

La iniciativa responde, según la Coordinadora, a su deseo de manifestar la protesta ante el "expolio económico al Tercer Mundo por parte de los países avanzados".