La misión de Yavlinski, fruto de un acuerdo Gorbachov-Yeltsin
Los contactos en Washington del economista soviético Grigori Yavlíriski con el grupo de los siete países más industrializados son el resultado de un acuerdo conjunto entre el líder de la URSS, Mijaíl Gorbachov, y el líder ruso, Borís Yeltsin, según confirmó ayer este últirno al término de la cuarta sesíón del Congreso de los Diputados de la Federación Rusa.En esta reunión, concluida el sábado, Yeltsin logró ver aprobado todo el paquete de documentos que da base legal a la institución presidericial en la Federación Rusa y permite celebrar elecciones el 12 de junio. El líder ruso comparte el int...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
Los contactos en Washington del economista soviético Grigori Yavlíriski con el grupo de los siete países más industrializados son el resultado de un acuerdo conjunto entre el líder de la URSS, Mijaíl Gorbachov, y el líder ruso, Borís Yeltsin, según confirmó ayer este últirno al término de la cuarta sesíón del Congreso de los Diputados de la Federación Rusa.En esta reunión, concluida el sábado, Yeltsin logró ver aprobado todo el paquete de documentos que da base legal a la institución presidericial en la Federación Rusa y permite celebrar elecciones el 12 de junio. El líder ruso comparte el interés de Gorbachov por una ayuda financiera occidental para la transición al niercado en la URSS, cuyo irionto se sitúa hoy en 100.000 millones de dólares.
Como un observador de excepción llegaba aver a la URSS la ex priniera rninistra británica Margaret Thatcher, cuyo prograrna para los próximos días incluye reuniones con Gorbachov; el primer ministro de la URSS, Valentin Pávlov, y el ministro de Defensa, Dmitri Yazov.
Yevgueni Primakov, miembro del Consejo de Seguridad de la URSS, y VIadimir Shcherbako, prinier viceprimer ministro, serán recibidos esta semaria en Washington por el presidente George Bush y el secretario de Estado, James Baker.
En un clima netamente poselectoral, Yeltsin hizo gala el sábado de una actitud sumamente conciliadora hacia el presidente Gorbachov. Durante las ocho horas que permanecieron juntos el viernes los líderes de repúblicas soviéticas en la dacha de Novo-Ogariovo, en las afueras de Moscú, Gorbachov y Yeltsin no cruzaron ninguna palabra desagradable, señaló el líder ruso. La reunión, en la que participaban los representantes de nueve repúblicas soviéticas favorables al Tratado de la Unión y represcritantes de las ex repúblicas autónomas, supuso un paso más hacia la firma de este documento.