La comunidad Europea eliminará en 1997 los productos cuyos gases dañan la capa de ozono
La Comunidad Europea (CE) eliminará de aquí a 1997 los productos cuyas emisiones dañan la capa de ozono. El compromiso asumido ayer en Bruselas por los ministros de Medio Ambiente de la CE va más allá que el Protocolo de Montreal, recientemente revisado. Los Doce decidieron también imponer normas para reducir las emisiones contaminantes de los coches de media y gran cilindrada.Las nuevas medidas, que entrarán en vigor en 1992, se unen a las aprobadas para los coches pequeños (de menos de 1.400 centímetros cúbicos de cilindrada) en 1989, bajo presidencia española.
El acuerdo sobre la pro...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
La Comunidad Europea (CE) eliminará de aquí a 1997 los productos cuyas emisiones dañan la capa de ozono. El compromiso asumido ayer en Bruselas por los ministros de Medio Ambiente de la CE va más allá que el Protocolo de Montreal, recientemente revisado. Los Doce decidieron también imponer normas para reducir las emisiones contaminantes de los coches de media y gran cilindrada.Las nuevas medidas, que entrarán en vigor en 1992, se unen a las aprobadas para los coches pequeños (de menos de 1.400 centímetros cúbicos de cilindrada) en 1989, bajo presidencia española.
El acuerdo sobre la protección de la capa de ozono significa adelantarse en tres años a los objetivos fijados en el Protocolo de Montreal. El compromiso supone reducir el 1 de enero de 1992 al 50% el uso de las sustancias elorofluorocarbonadas, utilizadas como gas impulsor en los aerosoles. El 1 de enero de 1995 la reducción alcanzará al 85% del total y el 1 de julio de 1997 se habrá alcanzado la eliminación total. Para los halones empleados, por ejemplo, en las espumas contra incendios, el acuerdo implica su desaparición total a final de 1997. Lo mismo sucederá con las sustancia s de tetracloruro de carbono, usadas en refrigeradores y aparatos de aire acondicionado, a pesar de que existen aspectos técnicos aún por resolver.
Esta declaración de los Doce abre la vía a la concesión de ayudas directas o ventajas fiscales para la eliminación de este tipo de aparatos que contienen sustancias contaminantes una vez que hayan dejado de usarse.El ministro español de Obras Públicas, Javier Sáenz Cosculluela, destacó que para conseguir este objetivo se había aprobado poner en marcha 11 medidas Fiscales de fomento al reciclado y destrucción de estas sustancias".
Emisiones de vehículos
La directiva sobre emisl ones contaminantes de los coches obligará a introducir cambios a los fabricantes. La nuevas normas imponen límites mucho más bajos en las emision'es de azufre, partículas y gases nocivos. A partir de 1992 quedarán obligados todos los tipos de vehículos. Los automóviles diesel tendrán que utilizar en el futuro gasóleo con menores contenidos de azufre. Los Doce se comprometieron a estudiar antes de finales de 1992 la implantación de una segunda fase de normas más severas, aunque su entrada en vigor se pospondrá a 1995.
La puesta en práctica de los controles más severos está sometida a plazos transitorios para permitir a la industria a adaptarse, y contempla la posibilidad de que los Gobiernos concedan incentivos fiscales para fomentar la compra y el uso de coches limpios. Grecia, por los problemas de contaminción de Atenas, y Alemania ya han anunciado que recurrirán a esas medidas. Asimismo, los ministros de Medio Ambiente de la CE aprobaron ayer-el programa MEDSPA para la protección ecológica del Mediterráneo. El programa está dotado con 25 millones de Ecus (3.250 millo nes de pesetas) para el periodo 1991-1 , 993, informa la agencia Efe. El p rograma MEDSPA permanece abierto no sólo a los países comunitarios sino tam- ién a países terceros ribereños del Mediterráneo. A partir de ahora las administraciones públicas y las empresas privadas que lo deseen someterán al examen de la Comisión Europea los diferentes proyectos que puedan obtener financiación dentro'de este programa. Los proyectos públicos serán finaciados hasta el 50% de su coste total y los privados hasta unmáximo del 30%.