ECOLOGÍA

La Administración resta pesimismo al informe de la CE sobre el estado de las costas y ríos españoles

El ministro de Obras Públicas, Javier Saénz Cosculluela restó ayer pesimismo al informe de la Comisión Europea sobre la contaminación registrada durante 1988 en el 19% de las playas españolas y en la mitad de los ríos y lagos. "La realidad es bastante mejor de lo que refleja este informe, aunque tengamos problemas en algunos sitios" declaró. Los datos del Ministerio de Sanidad revelan una ligera reducción durante 1989 en el grado de insalubridad, que sólo afectó al 17% de los puntos costeros y al 29% de las aguas continentales analizadas.

La ligera mejoría en el nivel sanitario de las a...

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El ministro de Obras Públicas, Javier Saénz Cosculluela restó ayer pesimismo al informe de la Comisión Europea sobre la contaminación registrada durante 1988 en el 19% de las playas españolas y en la mitad de los ríos y lagos. "La realidad es bastante mejor de lo que refleja este informe, aunque tengamos problemas en algunos sitios" declaró. Los datos del Ministerio de Sanidad revelan una ligera reducción durante 1989 en el grado de insalubridad, que sólo afectó al 17% de los puntos costeros y al 29% de las aguas continentales analizadas.

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La ligera mejoría en el nivel sanitario de las aguas y la inminente implantación de análisis obligatorios sobre siete parámetros -cinco físicos y dos visuales en todas las comunidades autónomas infunden optimismo a la Administración española sobre un avance progresivo en el control del problema, aunque asumen el deterioro existente. "No hay que olvidar que todavía no depuramos todas las aguas residuales", declaró ayer en los pasillos Congreso de los Diputados el ministro de Obras Públicas, Javier Saenz de Cosculluela a Europa Press.Para Ana Fresno, subdirectora general de Sanidad Ambiental "cada vez se controla más y mejor". Los informes anuales de la Comisión Europea se elaboran a partir de los datos ofrecidos por el Ministerio de Sanidad y Consumo que, a su vez, aporta cada autonomía. En 1989 aumentaron de 1020 a 1095 el número de pla yas analizadas y por primera vez se realizaron muestreos riguro sos en 184 puntos de aguas conti nentales. Las autoridades auto nómicas siguen aportando análi sis entre 2 y 10 parámetros. "Es posible", admite Ana Fresno, "que al conocer más tipos de pruebas podamos encontrar un mayor grado de insalubridad en las aguas".

Playas vascas

El País Vasco no se libra en el es tudio de 1989 de figurar, como en años precedentes, a la cabeza en cuanto a contaminación costera.

Si en 1988 un 39,6% de sus playas presentaba índices de contaminación superiores a los permitido, un año después el porcentaje se eleva al 43%. La Administración vasca asume plenamente los resultados del estudio de la CE que coinciden básicamente con la valoración sobre la calidad de las aguas del litoral que realiza Osakidetza (el Servicio Vasco de Salud), informa . Según los portavoces del Servicio de Salud, los análisis realizados en el País Vasco -quincenales durante seis mer ses- "son los más completos de España".

Para los responsables de la Agencia del Medio Ambiente de la Comunidad Valenciana el informe de la CE no refleja la situación actual, ni toma en consideración los puntos de muestreo para los análisis sanitarios, informa Joaquín Ferrandis. Según fuentes de dicha Agencia, los datos de la CE no incluyen la instalación de nuevas depuradoras, ni el resultado de los planes de saneamiento desarrollados en los últimos años por la Generalitat valenciana.

Los análisis realizados por la Agencia del Medio Ambiente durante 1989 revelan que sólo 14 playas de las controladas en el País Valenciano no cumplen los requisitos de la directiva comunitaria.

El director general de Medio Ambiente de la Generalitat de Cataluña, Jacint Mateu, juzgó ayer muy importante el "toque de atención" que representa el estudio de la CE para todos los países europeos y, especialmente, para España. Mateu, que se mostró satisfecho "por el aceptable nivel que tienen la inmensa mayoría de las playas catalanas en relación con las de otras comunidades", opinó que las banderas azules concedidas estos últimos años han sido importantes para la obtención de este nivel. Mateu atribuyó también el buen estado del litoral catalán a la "corresponsabilización de todos los poderes públicos implicados en la conservación de las playas".

El gobierno de Cantabria invertirá 7.000 millones de pesetas durante cuatro años en la depuración de los ríos responsables de la contaminación de la playa de Suances, única de la región persistente en superar límites sanitarios fijados por la CE, informa Jesús Delgado.

Falta de información

El informe sobre las playas de Andalucía elaborado por la Consejería de Salud considera a 129 puntos "muy buenos y en buenas condiciones higiénicas", a 12 "regulares" y a 9 abiertamente "malos", informa Margot Molina. El informe incluye otras 21 playas dentro de la categoría de "no clasificadas" por carecer de información sobre el estado en el que se encuentran.

La falta de información impedirá igualmente al Ministerio de Sanidad enviar a la CE resultados sobre el estado en 1989 de los ríos extremeños, única comunidad que ha incumplido este compromiso. Según la CE, durante 1988 las zonas de baño de Extremadura habían pasado de un 100% de salubridad a registrar un 22% de puntos contaminados.

Recalcitrantes puntos negros

En los informes de la CE sobre la calidad de las zonas de baño en Europa referidos a 1987 y 1988 se repiten una serie playas españolas en las que la contaminación de sustancias coliformes y fecales son superiores a las permitidas. El informe de 1988 se presentó el lunes en Bruselas, debido al retraso de los Gobiernos en facilitar los datos.Los puntos negros que se repiten son los siguientes: Sant Adrià del Besòs, El Prat de Llobregat y Barcelona en Cataluña. En la Comunidad Valenciana: Almazora, Puebla Farnals, Masamagrell y Alboraya en la provincia de Castellón y Valencia, Sueca y Miramar en la de Valencia. Almería, Roquetas, El Ejido, Motril, Salobreña, Almuñecar, Málaga, Benalmádena, Mijas, Marbella, Estepona y Cartaya repiten en Andalucía.

En Canarias aparece nuevamente como punto negro Las Palmas y en Galicia Vigo, Bueu, Fisterra, Malpica y Miño. En Asturias: Tapia de Casariego, Gozón, Gijón, Ribadesella y Llanes. En Cantabria, Suances.

En el País Vasco figuran Ciérvana, Guetxo, Plentzia, Gorliz, Bakio, Sukarrieta, Ibarrangelua, Ea, Ondarroa, en la provincia de Vizcaya, una de las más contaminadas y Zumaia, Orio y San Sebastián, en Guipúzcoa.

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