Inaugurada en el MOMA la retrospectiva dedicada a Francis Bacon con motivo de su 80º cumpleaños
El Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA) inauguró ayer -y permanecerá abierta hasta el 28 de agosto- una exposición retrospectiva con motivo del 80º cumpleaños del artista inglés Francis Bacon, considerado uno de los más importanters pintores contemporáneos. A través de unos 60 cuadros se puede observar el poderoso trabajo de un artista que representa la figura humana de manera perturbadora.
En esta retrospectiva se recogen los trabajos más personales del pintor y su serie de reinterpretaciones de las tradiciones religiosas. Las pinturas de la exposición provienen de diversas colec...
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El Museo de Arte Moderno de Nueva York (MOMA) inauguró ayer -y permanecerá abierta hasta el 28 de agosto- una exposición retrospectiva con motivo del 80º cumpleaños del artista inglés Francis Bacon, considerado uno de los más importanters pintores contemporáneos. A través de unos 60 cuadros se puede observar el poderoso trabajo de un artista que representa la figura humana de manera perturbadora.
En esta retrospectiva se recogen los trabajos más personales del pintor y su serie de reinterpretaciones de las tradiciones religiosas. Las pinturas de la exposición provienen de diversas colecciones norte y suramericanas, europeas, japonesas y australianas. La retrospectiva se presentó anteriormente en Washington DC y viajó seguidamente a Los Ángeles.Nacido en Irlanda de padres ingleses en 1909, Bacon se instaló por su cuenta en Londres a los 16 años. Las pinturas que realizó mientras trabajaba como diseñador y decorador fueron destruidas casi en su totalidad por el propio Bacon, que, a los 35 años, decidió dedicarse únicamente a la pintura Sus primeros trabajos en esos años (finales de los cuarenta), fueron estudios de cabezas y bocas que pintaba de manera inquietante y amenazadora. En los años cincuenta pintó una serie de reinterpretaciones de obras maestras de la historia del arte. Velázquez y Van Gogh fueron los más estudiados, pero también trabajó el movimiento inspirándose en las fotografías Estudios de la moción de Edward Muybridge. En los años sesenta empezó sus dípticos y trípticos de complejas y simbólicas composiciones. También retrató repetitiva y hasta obsesivamente a algunos de sus amigos.