Novilleros triunfadores repiten en la plaza de Las Ventas
El madrileño Mariano Jiménez y el albacetense Manuel Caballero, que dieron una vuelta al ruedo cada uno en sus respectivas actuaciones en Las Ventas esta temporada, vuelven hoy a esta plaza. El tercer novillero es el también madrileño, aunque criado en Mora de Toledo (Toledo), Joselito Vega. Lidiarán novillos de La Guadamilla en un festejo que comienza a las seis de la tarde.Jiménez, 19 años, se muestra optimista en su repetición: "Creo que mejoraré mi actuación de hace dos semanas porque ya no tendré los nervios que me impidieron rendir entonces a tope. Además, el lote que me correspondió fue...
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El madrileño Mariano Jiménez y el albacetense Manuel Caballero, que dieron una vuelta al ruedo cada uno en sus respectivas actuaciones en Las Ventas esta temporada, vuelven hoy a esta plaza. El tercer novillero es el también madrileño, aunque criado en Mora de Toledo (Toledo), Joselito Vega. Lidiarán novillos de La Guadamilla en un festejo que comienza a las seis de la tarde.Jiménez, 19 años, se muestra optimista en su repetición: "Creo que mejoraré mi actuación de hace dos semanas porque ya no tendré los nervios que me impidieron rendir entonces a tope. Además, el lote que me correspondió fue dificil, y pese a todo estuve bien". Este optimismo lo basa también en su conocimiento de las reses de La Guadamilla, a la que pertenecían los novillos que lidió con éxito en un festejo celebrado, en 1989, en Villa del Prado (Madrid). El novillero, que volverá a contar con el apoyo en los tendidos de sus muchos partidarios, califica al resto del público de la tarde de su presentación de "difícil, pero entendido, como corresponde a la primera plaza del mundo". Jiménez, contratado para la feria de abril en Sevilla, se ha preparado para ambos compromisos en varios tentaderos por tierras salmantinas. A Caballero, 20 años, lo que más le impresionó fueron los olés de la afición: "Han sido los más emocionantes que he escuchado, gracias a ellos me inspiré, pues a partir del primero me vine arriba y saqué lo mejor de mi toreo". Lamenta sus fallos con la espada, que le impidieron cortar oreja. "He venido muchas veces a los toros en Las Ventas y sé que los bajonazos que admiten en otras plazas en Madrid se abroncan y con razón".
Otro asiduo espectador de los festejos venteños es Vega, 20 años, que ya actuó en este coso en 1987 cuando era alumno de la escuela taurina de Madrid y cortó oreja en una becerrada. "Aspiro a repetir ese triunfo, pues los que no pagamos por torear lo tenemos casi imposible. Nuestra única salvación es Madrid".
Debutó con picadores, también en 1987, con Litri y Camino, de los que afirma que "ellos sí que lo han tenido fácil". Desde entonces ha actuado en muchos pueblos frente a novillos muy grandes: "Después de matar esos animales ya no me asusta nada, ni Las Ventas. Al contrario, es cumplir el sueño de mi vida".