Una encrucijada similar a la uruguaya

Patricio Aylwin opina que el caso de Chile es más parecido al de Uruguay que al de Brasil o Argentina. "Históricamente", dice, "nuestras fuerzas armadas -en Chile y en Uruguay- tuvieron muy pocas interferencias políticas. En Argentina y en Brasil fue frecuente la intervención política a través de la historia. En Chile no. El profesionalismo de las fuerzas armadas chilenas es rescatable y ellas entienden que cumplieron una tarea de restauración institucional, ésa es la visión que tienen, en vista de una crisis en que gran parte de la población -ellos creen que la mayoría- pedía su intervención....

Patricio Aylwin opina que el caso de Chile es más parecido al de Uruguay que al de Brasil o Argentina. "Históricamente", dice, "nuestras fuerzas armadas -en Chile y en Uruguay- tuvieron muy pocas interferencias políticas. En Argentina y en Brasil fue frecuente la intervención política a través de la historia. En Chile no. El profesionalismo de las fuerzas armadas chilenas es rescatable y ellas entienden que cumplieron una tarea de restauración institucional, ésa es la visión que tienen, en vista de una crisis en que gran parte de la población -ellos creen que la mayoría- pedía su intervención. Creado un cauce jurídico, que ellos mismos han establecido y que no es rígido, y aceptado por ellos mismos que el futuro Parlamento podrá modificar ese cauce, han quedado abiertos caminos de convivencia que esperamos que funcionen".La amenaza de Pinochet de que se acabará el Estado de derecho si tocan a uno solo de mis hombres le parece a Aylwin "desafortunada y ha sido, en cierto modo, corregida por él mismo respecto a su significado. El Estado de derecho en Chile no depende de que se toque a un hombre, ni depende de la voluntad del general Pinochet. Eso debe ser muy claro".

Piensa Aylwin que "en Chile, en el grueso de la población, incluso en los sectores vinculados a las víctimas de las violaciones a derechos humanos, hay más anhelo de esclarecimiento de la verdad que espíritu de venganza y hay disposición a, conociéndose la verdad y determinándose las responsabilidades, buscar caminos de reconciliación y de perdón. Los métodos y procedimientos que pongamos en práctica sería prematuro entrar a anunciarlos. Creo que deben ser fruto de consensos que se vayan gestando en los meses siguientes".

"Los partidos de la concertación tienen una responsabilidad muy grande: asegurar la estabilidad y el respaldo al Gobierno para asegurar su continuidad. La continuidad pasa, a mi juicio, por la solidez de la concertación", afirma el futuro presidente.

Aylwin manifiesta su confianza en que el Partido Comunista Chileno abandone la tesis de la rebelión popular de masas, se incorpore a la vida política normal del país y sujete bajo su control al Frente Patriótico Manuel Rodríguez, brazo armado de la oposición política de izquierda al regimen de Pinochet. Entre otros temas, Aylwin señaló que la Central Nacional de Inteligencia (CNI), dedicada a la represión política bajo el anterior régimen ha quedado disuelta, pero que cualquier país tiene órganos de seguridad, civiles y militares, aunque destinados a defender la soberanía nacional y no a reprimir a la población.