La CE investiga el impacto ecologico de una urbanización en construcción en el Moncayo

La Agencia Europea de Medio Ambiente ha solicitado un informe sobre el impacto medioambiental que representará la construcción de una urbanización en la serranía del Moncayo, entre las provincias de Soria y Zaragoza. Organizaciones ecologistas, asociaciones socioculturales y varios municipios del somonte se oponen al proyecto.

El pico del Moncayo observa desde la altura de sus 2.313 metros la lucha que libran en sus faldas grupos ecologistas y una constructora que pretende levantar una urbanización de 207 chalés en las proximidades del parque natural.Los opositores a este proyecto han l...

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La Agencia Europea de Medio Ambiente ha solicitado un informe sobre el impacto medioambiental que representará la construcción de una urbanización en la serranía del Moncayo, entre las provincias de Soria y Zaragoza. Organizaciones ecologistas, asociaciones socioculturales y varios municipios del somonte se oponen al proyecto.

El pico del Moncayo observa desde la altura de sus 2.313 metros la lucha que libran en sus faldas grupos ecologistas y una constructora que pretende levantar una urbanización de 207 chalés en las proximidades del parque natural.Los opositores a este proyecto han llevado a cabo concentraciones y manifestaciones y han trasladado la protesta a la sede del gobierno autónomo, construyendo un simulacro de chalés en el patio de su sede, en Zaragoza. La Coordinadora para Defensa de las Aves ha enviado a la Dirección General de Medio Ambiente de la CE un informe en el que se detalla la localización de la urbanización, los límites del parque natural Dehesa del Moncayo, así como las aves protegidas que en él habitan: 100 parejas de buitres leonados, cinco de águilas reales, cinco de búhos reales, halcones abejeros, entre otras.

La empresa Construcciones y Urbanizaciones Grado S. L. ha provisto edificar en una primera fase 207 chalés, que albergarán a más de 1.000 personas, número que al final puede elevarse hasta 700 viviendas. El proyecto carece de los permisos de edificación y vertido, no así de urbanización, pues el Ayuntamiento de Añón, -localidad de 362 habitantes en cuyo término municipal se ubica el proyecto- aprobó en 1986 un plan parcial recalificando unos terrenos, que incluían un encinar de la zona ampliable del parque natural del Moncayo, en urbanizables. Se ha contruido ya el chalé piloto y la infraestructura de la urbanización. Los futuros propietarios de los chalés decidieron continuar adelante con el proyecto.

Ampliación

La dehesa del Moncayo fue declarada parque natural en 1978; tiene una extensión de 1.300 hectáreas. Los ecologistas iniciaron varios años una campaña para la ampliación del parque. En plena campaña surgió la urbanización, ubicada en el término municipal de Añón.

El Tribunal de Justicia de Aragón solicitó al gobierno autónomo un plan de ordenación de los recursos naturales del Moncayo y su somontano, un diagnóstico medio-ambiental de la zona y la paralización de las obras. El ayuntamiento de Tarazona pidió al gobierno regional la ampliación del parque de Moncayo. La comisión provincial de urbanismo se pronunció en contra de los chalés; la Confederación Hidrográfica del Ebro rechazó un primer proyecto de vertidos y el Ayuntamiento de Añón denegó el pasado día 15 la licencia de edificación. La empresa ha declarado que todo es legal y que seguirá los pasos previstos. En medio de la polémica, se han cruzado las primeras querellas como la presentada por la constructora contra el alcalde de Alcalá de Moncayo, Juan Melero, por sus supuestas injurias y calumnias al manifestar que había recibido amenazas.

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