También rumanos y checoslovacos

En las carreteras que unen Hungría con Checoslovaquia hay un enorme flujo de automóviles de alemanes del Este que regresan a la RDA. Si llegan después del lunes próximo, día en que se Inicia el período escolar y que caducan los visados, sufrirán represalias. La organización caritativa de la Orden de Malta, encargada junto a la Cruz Roja de ayudar a los refugiados, afirmó ayer que el número de éstos podría aumentar, ya que cada día llegan aproximadamente 300 alemanes del Este que han pasado ilegalmente la frontera desde Checoslovaquia a Hungría.Desde la noche del viernes al sábado, hasta la tar...

En las carreteras que unen Hungría con Checoslovaquia hay un enorme flujo de automóviles de alemanes del Este que regresan a la RDA. Si llegan después del lunes próximo, día en que se Inicia el período escolar y que caducan los visados, sufrirán represalias. La organización caritativa de la Orden de Malta, encargada junto a la Cruz Roja de ayudar a los refugiados, afirmó ayer que el número de éstos podría aumentar, ya que cada día llegan aproximadamente 300 alemanes del Este que han pasado ilegalmente la frontera desde Checoslovaquia a Hungría.Desde la noche del viernes al sábado, hasta la tarde de ayer, 130 ciudadanos de países del Este habían pasado ilegalmente la frontera verde que separa Hungría de Austria. Según la gendarmería austriaca, la mayor parte de ellos procede de la RDA, pero hay también checoslovacos y rumanos.

La acción sin precedentes de organizar el escape de refugiados de los Estados hermanos inquieta a los países del Este y está colocando a Budapest en una situación cada vez más incomoda. El desmantelamiento del telón de acero por parte de Hungría está siendo usado cada vez más por búlgaros, rumanos y checoslovacos como vía de escape hacía Occidente.