Bush concede a Hungría trato económico de favor

El presidente norteamericano, George Bush, presentó ayer en Budapest un paquete de medidas de apoyo a la economía húngara similar al ofrecido a Polonia en Varsovia, y anunció que Hungría es el primer país al que Estados Unidos concederá la cláusula de nación más favorecida sin revisiones temporales. Las autoridades húngaras expresaron su plena satisfacción por las ayudas norteamericanas y confirmaron a Bush el carácter irreversible de la democratización, y el ministro de Estado, Imre, Poszgay, reiteró que si los comunistas pierden las elecciones cederán el poder. "No tenemos por qué consultar ...

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El presidente norteamericano, George Bush, presentó ayer en Budapest un paquete de medidas de apoyo a la economía húngara similar al ofrecido a Polonia en Varsovia, y anunció que Hungría es el primer país al que Estados Unidos concederá la cláusula de nación más favorecida sin revisiones temporales. Las autoridades húngaras expresaron su plena satisfacción por las ayudas norteamericanas y confirmaron a Bush el carácter irreversible de la democratización, y el ministro de Estado, Imre, Poszgay, reiteró que si los comunistas pierden las elecciones cederán el poder. "No tenemos por qué consultar al respecto a nuestros aliados".

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En la última jornada de su gira por los dos países más reformistas del Este de Europa, Polonia y Hungría, Bush elogió calurosamente el proceso húngaro, manifestó el apoyo norteamericano al mismo y calificó el actual momento como "umbral de grandes e históricos cambios; Hungría está volviendo a su casa".Bush, que había sido aclamado por decenas de miles de personas a su llegada a Budapest el martes, presentó sus iniciativas para dar un nuevo impulso a la economía húngara y a la cooperación húngaro-norte americana, en un discurso pronunciado en la universidad Carlos Marx.

Bush volará a primera hora de la mañana de hoy a París, donde asistirá a la cumbre de los siete grandes y a los actos del bicentenario de la Revolución Francesa. Bush comenzó su discurso con una referencia a la ironía que supone la intervención del presidente norteamericano en la universidad que lleva el nombre del autor de El capital, un discurso que, como se esperaba, se convirtió en una apología del mercado libre y el pluralismo político. Lo que posiblemente no sabía el presidente es que un gran busto de Marx se hallaba escondido detrás de las banderas de Estados Unidos y Hungría que cubrían el estrado desde el que habló.

Durante toda su gira, Bush ha puesto gran énfasis en que el estrechamiento de las relaciones de Polonia y Hungría con Estados Unidos no va en contra de nadie y que nunca "tendrá la apariencia de injerencia", como subrayaba ayer el secretario de Estado húngaro, Laszlo Kovacs. Ayer, Bush señaló ante varios cientos de estudiantes y profesores que abarrotaban el aula magna de la universidad que "hay que decir a la dirección de la URSS que tiene todo que ganar y nada que perder o temer de los cambios pacíficos; podemos trabajar juntos para ir más allá de la contención, más allá de la guerra fría Estamos en el umbral de una nueva era. Esto es posible porque gente con valor ha creado partidos de oposición y porque los dirigentes húngaros están mostrando el coraje político definitivo, el de someterse a la voluntad popular en unas elecciones libres", manifestó Bush entre fuertes aplausos de la audiencia.

Cita con Nyers

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Antes, el presidente norteamericano había mantenido entrevistas con los principales dirigentes del partido y del Gobierno. Primero se reunió con el presidente del partido, Reszö Nyers, que estaba acompañado por el secretario general, Karoly Grosz. Después habló con Matyas Szürös, presidente del Parlamento, que, según fuentes oficiales, le pidió mayores presiones sobre Rumanía para paliar la represión a que está sometida en este país la minoría húngara. Con el primer ministro, Miklos Nemeth, habló de la dificil situación económica, de la forma de reducir el endeudamiento -que, con 18.000 millones de dólares por habitante, es el más alto de Europa del Este- y del paquete de ayudas norteamericano y formas de intensificar la cooperación.

Las medidas anunciadas por Bush incluyen la presentación por parte de Estados Unidos en la cumbre de los siete grandes de una propuesta de acciones concertadas en favor de Hungría, un fondo inicial de 25 millones de dólares para el fomento del sector privado en el interior, la exención de la revisión anual de la cláusula de país más favorecido en Estados Unidos y el ingreso de Hungría en el Sistema Generalizado de Preferencias, que ofrece reducciones concretas de aranceles. "Esto concede a Hungría el acceso más liberal al mercado norteamericano en el plazo más largo que nuestras leyes contemplan", señaló Bush en la universidad de Budapest. Además, Washington creará el marco legal para un sistema de garantías a la inversión privada en Hungría, abrirá un centro de medio ambiente para Europa central y oriental con sede en Budapest y se establecerá un programa de intercambio de científicos, profesionales y estudiantes. En el terreno cultural, EE UU abrirá una Casa de América en Budapest y enviará profesores de inglés a la capital y a los 19 distritos húngaros. Esta medida llega el mismo año en que se ha abolido en Hungría la enseñanza obligatoria del ruso.

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