Los bancos acreedores acceden a reducir la deuda mexicana en un 30%

El comité de bancos acreedores de México ha respondido a la petición mexicana de reducción de la deuda con el ofrecimiento de disminuir el valor facial de los préstamos que tiene que devolver ese país en un 30%, según informa el diario londinense Financial Times en su edición de hoy.Este plan, propuesto por los 15 principales bancos acreedores de México, podría reducir los pagos por servicio de la deuda mexicana en 1.800 millones de dólares anuales a lo largo de tres años; una cuantía sensiblemente inferior a los 4.000 o 4.500 millones de dólares de reducción solicitados inicialment...

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El comité de bancos acreedores de México ha respondido a la petición mexicana de reducción de la deuda con el ofrecimiento de disminuir el valor facial de los préstamos que tiene que devolver ese país en un 30%, según informa el diario londinense Financial Times en su edición de hoy.Este plan, propuesto por los 15 principales bancos acreedores de México, podría reducir los pagos por servicio de la deuda mexicana en 1.800 millones de dólares anuales a lo largo de tres años; una cuantía sensiblemente inferior a los 4.000 o 4.500 millones de dólares de reducción solicitados inicialmente por el país latinoamericano.

México podría rechazar esta propuesta pero, de no hacerlo, permitiría elegir a la banca acreedora entre distintas opciones que se resumen en nuevos préstamos al mismo tipo de interés o los mismos a menores tipos, aunque sea cual sea la posibilidad elegida el recorte de la deuda sería siempre de ese 30%.

La primera opción consiste en la reducción del principal de la deuda a medio y largo plazo (un total de 54.000 millones de dólares) en un 30%, a través del intercambio de estos préstamos por bonos a 30 años, con un valor facial del 70% de ese total y a tipos de interés de mercado.

La segunda posibilidad consiste en canjear los préstamos existentes por otros a menores tipos de interés pero sin variación alguna en el valor facial. Los nuevos bonos a 30 años que se canjearían por los préstamos concedidos antes de 1982 (un total de 39.000 millones de dólares) cargarían un interés del 7,25%, mientras que los 15.000 millones de préstamos posteriores a esa fecha deberían pagar el 7,875%.

Los bancos también han solicitado al Gobierno mexicano un intercambio (swap) de deuda por activos por un total de 3.000 millones de dólares.

La oferta realizada por el comité de bancos acreedores se limita a un plazo de tres años aunque podría ser ampliable a cuatro si el Fondo Monetario Internacional facilitara algún tipo de ayuda para ese último año. Los bancos siguen también presionando al FMI y al Banco Mundial para que asegure el pago del principal de la deuda.

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