García Vargas afirma que los nuevos enfermos de SIDA son culpables de su infección

La sociedad puede considerar culpables de haberse infectado por el virus del síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA) a una segunda generación de portadores, dado que no ha puesto los medios necesarios y ya conocidos para evitar la infección, según manifestó ayer en Montreal el ministro de Sanidad y Consumo español, Julián García Vargas, quien copresidió la segunda sesión plenaria de la V Conferencia Internacional sobre el SIDA

.La información sobre las vías de transmisión, manifestó el ministro, "trasladada con claridad a la población, convierten al SIDA en una enfermedad inv...

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La sociedad puede considerar culpables de haberse infectado por el virus del síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA) a una segunda generación de portadores, dado que no ha puesto los medios necesarios y ya conocidos para evitar la infección, según manifestó ayer en Montreal el ministro de Sanidad y Consumo español, Julián García Vargas, quien copresidió la segunda sesión plenaria de la V Conferencia Internacional sobre el SIDA

.La información sobre las vías de transmisión, manifestó el ministro, "trasladada con claridad a la población, convierten al SIDA en una enfermedad invididualmente evitable, al existir un control sobre los productos hemoderivados, donaciones de sangre, órganos, semen [productos a través de los cuales se puede transmitir el virus causante del síndrome]. Las únicas vías que quedan abiertas", afirmó, "son las relaciones sexuales y el intercambio de jeringuillas. Ambas pueden ser fácilmente controlables en el terreno personal".Sobre este punto, declaró que "el 90% de la población española ya conoce las formas de contagio del síndrome", por las campañas de prevención. El ministro agregó que la situación del síndrome en España "sigue siendo preocupante. Este país tiene 2.780 casos de SIDA, en su mayoría individuos adictos a drogas por vía intravenosa".

El ministro hizo un llamamiento en su intervención a la defensa de la confidencialidad, el derecho al anonimato y el derecho de los enfermos del síndrome a no ser excluidos socialmente. Estos criterios han sido debatidos, precisó, en el consejo de ministros de Salud de la CE.Pidió además "una correcta definición del caso de SIDA y su aplicación homogénea". El titular de Sanidad señaló a este periódico que entre los criterios actuales de caso, adoptados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para diagnosticar el SIDA, se incluyen situaciones como padecer tuberculosis, más frecuentes en los grupos de riesgo, como son los drogadictos, mayoritarios en España entre los enfermos de SIDA. "Entonces habría que saber si ese drogadicto padecía tuberculosis antes de tener contacto con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH)", afirmó.

García Vargas se reunió ayer con casi cien delegados españoles, médicos en su mayoría, y les expresó su preocupación por el rechazo de los enfermos de SIDA por los sanitarios, reflejado en una encuesta publicada recientemente por este periódico. Manifestó que algunos servicios médicos de los hospitales, no relacionados habitualmente con enfermos del síndrome, son reacios a tratar a estos pacientes.Sanciones

Justificó tal actitud debido a que este tipo de enfermos son doblemente dificiles dada su condición de drogodependientes e infectados, en la mayoría de los casos.

En la misma reunión, Garcia Vargas se mostró de nuevo parti dario de sancionar el consumo de drogas en público. El titular de Sanidad defendió una "sanción administrativa o una penalización en caso de incurrir en repetición de éstas, contra el con sumo de drogas en público". El ministro precisó que esta medida habría de ser tomada con matizaciones, sin motivos morales, y se refirió explícitamente al consumo de heroína en público. Pidíó además a los médicos su apo yo contra las posturas tolerantes hacia la drogodependencia.

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