Una gala lírica excepcional abrirá el año musical

El año musical 1989 comienza el próximo sábado con una gala lírica de categoría excepcional, organizada y patrocinada por las Comunidades Europeas, el V Centenario y el grupo Instituto Nacional de Industria. Se celebrará en el Auditorio Nacional de Música, y en una sola noche reunirá los nombres de Montserrat Caballé, Victoria de los Ángeles, José Carreras, Alfredo Kraus, Ana María González, Juan Pons y el más reciente descubrimiento de la escuela española de canto: la soprano Isabel Rey.

Los directores Antonio Ros Marbá y José Collado y el compositor Leonardo Balada se pondrán al fre...

El año musical 1989 comienza el próximo sábado con una gala lírica de categoría excepcional, organizada y patrocinada por las Comunidades Europeas, el V Centenario y el grupo Instituto Nacional de Industria. Se celebrará en el Auditorio Nacional de Música, y en una sola noche reunirá los nombres de Montserrat Caballé, Victoria de los Ángeles, José Carreras, Alfredo Kraus, Ana María González, Juan Pons y el más reciente descubrimiento de la escuela española de canto: la soprano Isabel Rey.

Los directores Antonio Ros Marbá y José Collado y el compositor Leonardo Balada se pondrán al frente de la Orquesta y Coro Nacionales horas antes de que la primera agrupación inicie una importante gira por Japón.Escuchar a José Carreras en dúos de Verdi y Caballero con Juan Pons o la Caballé, o en La tabernera del puerto, de Sorozábal, el último grande de la zarzuela recientemente fallecido; oír a Kraus en La Arlesiana, de Cilea, o el dúo de Luisa Fernanda, con Ana María González; gozar de la pureza de línea y color de Victoria de los Ángeles en la siguiriya de Carmen, en la Nana de Montsalvatge o El cant dels ocelis, tres de sus más célebres canciones; seguir a Caballé en el raramente escuchado Himno de las naciones, de Verdi, o en El Cid de Masenet, o a Juan Pons en Andrea Chenier, el Maestro Campanone o La fuerza del destino, con José Carreras, constituiría ya una convocatoria fuera de serie.

Pero además, Ana María González nos dará La Traviata, Isabel Rey, La sonámbula; Ros Marbá, el preludio de La fuerza del destino, y Leonardo Balada, fragmentos sinfónicos de su ópera Viva Zapata.

Una gala así provocaría en Estados Unidos y otros países no sólo sensación, sino una de esas auténticas y ya legendarias batallas por las localidades que las colocan a precios astronómicos. Los organizadores del espectáculo madrileño, que llegará a todas partes en directo o diferido a través de la radio, la televisión, el disco, el vídeo y la casete, han establecido unos precios que va desde las 2.000 a las 7.000 pesetas entrada, a lo que se añade la posibilidad de entradas-donativos, fijados en 25.000 pesetas.

Fines benéficos

No se trata tan sólo de pagar un concierto de excepción, sino de colaborar, como hacen todos cuantos intervienen, en los fines de la Fundación Carreras contra la leucemia y en la labor expansiva de la Cruz Roja Española en Centroamérica. De ahí que el grupo INI y sus más de 60 empresas hayan asumido en exclusiva el patrocinio del que será primer gran acto cultural de cuantos se planifican para un plazo que va desde ahora mismo hasta octubre de 1992, dentro de las celebraciones del V Centenario del Descubrimiento de América-Encuentro de dos Mundos.La venta de localidades comienza el próximo miércoles día 4 de enero en las taquillas del Auditorio Nacional, el edificio recientemente inaugurado en la calle del Príncipe de Vergara, y cuya construcción por el arquitecto García de Paredes, con la asesoría acústica del ingeniero berlinés Lothar Cremer, autor de la ópera de Berlín, señala un hito en el desarrollo lírico español, pues, aparte sus valores como sala musical, permitirá la devolución al teatro Real de su condición de escenario operístico, lo que está previsto para el mismo año clave de 1992.