La muestra de cine latinoamericano hace balance de sus primeros 10 años de existencia

El 3 de diciembre de 1979 se inauguró en La Habana el I Festival de Cine Latinoamericano. Una década después, en esta décima edición, la organización de la muestra ha programado para las últimas jornadas una retrospectiva completa de los filmes ganadores de los primeros premios, así como un resumen de los principales acontecimientos que tuvieron lugar cada diciembre de estos años dentro del marco de las actividades que tienen lugar paralelas al festival.

Pastor Vega, director de este encuentro de filmes y cineasta desde su primera edición, hace un apresurado balance de su evolución:...

El 3 de diciembre de 1979 se inauguró en La Habana el I Festival de Cine Latinoamericano. Una década después, en esta décima edición, la organización de la muestra ha programado para las últimas jornadas una retrospectiva completa de los filmes ganadores de los primeros premios, así como un resumen de los principales acontecimientos que tuvieron lugar cada diciembre de estos años dentro del marco de las actividades que tienen lugar paralelas al festival.

Pastor Vega, director de este encuentro de filmes y cineasta desde su primera edición, hace un apresurado balance de su evolución:"El papel principal del festival es descubrir filmes y cineastas, y para ello tiene que abrirse a todos. Esto nos crea problemas de organización, sobre todo a causa del crecimiento experimentado durante los últimos años, que con frecuencia nos obligan a resolver la cuadratura del círculo".

"Todo realizador latinoamericano", prosigue Pastor Vega, "desde el más famoso al más desconocido, tiene aquí un sitio. Debido a ello no podemos establecer un programa definitivo de antemano, porque de hacerlo tendríamos que renunciar a traer el cine de los más pobres, cineastas que a menudo sólo tienen una copia de sus películas y, al no tener dinero para enviárnosla, llegan aquí durante estos días con las latas bajo el brazo. Ya sé que esto les crea problemas a los informadores pero les pedimos paciencia".

Nombres nuevos y consagrados

A lo largo de estos 10 años, el Festival de La Habana ha dado a conocer muchos nombres nuevos del cine de esta América y ha extendido obras de otros nombres ya consagrados. Las actividades del encuentro habanero, a tenor de los datos ofrecidos por Pastor Vega, se han multiplicado por cinco en los últimos años. Las proyecciones son prácticamente inabarcables para un corresponsal que se ve obligado a seleccionar entre una oferta que desborda sus posibilidades.El cine La Rampa exhibe estos días, y hasta el de la clausura, todos los filmes premiados en estos 10 años, y su pantalla recupera obras, algunas olvidadas y otras vivas en el recuerdo, desde Sergio Giral (director del filme cubano Maluala) y León Hirszman (director del filme brasileño Ellos no usan smoking), que obtuvieron los primeros premios en 1978 y 1979, hasta Alfredo Aristaráin y Tomás Gutiérrez Alea, que con sus memorables Tiempo de revancha y Hasta cierto punto, respectivamente, rompieron la inicial pequeña audiencia del festival cubano y pusieron los cimientos de su vastedad actual.

Otros cineastas galardonados con los premios Coral son el brasileño Nelson Pereira dos Santos, el mexicano Paúl Leduc, el argentino Fernando Solanas, el cubano Humberto Solas, la brasileña Susana Arnaral y el argentino Carlos Sorin. Grandes colas se forman en los accesos al cine donde se proyectan estas obras, y tumultuosas concentraciones de habaneros se ven en cada una de las 17 salas del festival con alborotos incluidos, como el que se formó el pasado martes ante la sala Yara y que fue cortado por una expeditiva carga de la policía habanera. La capacidad de la sala no aceptaba ni la mitad de los aspirantes a ver La boca del lobo, del peruano Francisco Lombardi. Se calcula que unos 700.000 espectadores asistirán al conjunto de las proyecciones.

La presencia del cine de Estados Unidos es una de las notas permanentes del festival, bien a través de algunas de sus figuras claves de las corrientes independientes del cine de Hollywood y Nueva York, como Robert Redford, Jack Lemmon (la carrera mundial de Desaparecido, de Costa Gavras, fue aquí acelerada con la presencia de este actor), Arthur Penn, Bob Rafelson, PaulSchader, Francis Coppola, Gregory Peck, Oliver Stone, Sidney Pollack y otros.

La impresión generalizada entre los asistentes es que las dimensiones adquiridas por el festival, obligarán en el futuro a sus organizadores a buscar salidas ingeniosas que hagan compatible el igualitarismo que preconizan con algún sistema selectivo orientador que permita a los informadores orientarse en esta masa inabarcable de proyecciones.