Viaje

Querido Juan Luis: empiezo así porque siempre me fuiste simpático. Soy una asturiana afincada en Bilbao, tengo 67 años y el día 10 de febrero hizo 50 años que estoy casada con un gran hombre, y somos tan felices como el primer día. Nos hubiera gustado celebrarlo mañana con un viajecito de esos que medio regala el INSS (no sé si lo puse bien); total, me refiero a esos viajes que disfrutan algunos que tienen buenas pagas. Fui enfermera con 16 años, toda la guerra del Norte, trabajando, cuidando y con solando a muchos soldados heridos, y durante ésta conocí al que hoy es mi marido; conocí...

Querido Juan Luis: empiezo así porque siempre me fuiste simpático. Soy una asturiana afincada en Bilbao, tengo 67 años y el día 10 de febrero hizo 50 años que estoy casada con un gran hombre, y somos tan felices como el primer día. Nos hubiera gustado celebrarlo mañana con un viajecito de esos que medio regala el INSS (no sé si lo puse bien); total, me refiero a esos viajes que disfrutan algunos que tienen buenas pagas. Fui enfermera con 16 años, toda la guerra del Norte, trabajando, cuidando y con solando a muchos soldados heridos, y durante ésta conocí al que hoy es mi marido; conocí toda la posguerra, ocho años de cárcel de mi marido, trabajando para poderle ayudar, y después de esto, mi marido trabajó durante 32 años, retirándose con la mínima. Fue capitán del Ejército re publicano, y por ello, tras mucho papeleo y justificaciones, tiene otra pensión de 35.165; la de la Seguridad Social es de 28.395, pues por cobrar la de Hacienda nos descontaron 7.000 pesetas de la Seguridad Social; así que, claro, pagamos. renta de casa, luz y agua, y queda poco para viajes. No sé si mi carta tendrá interés, pero si el señor Serra leyera EL PAÍS, que es un periódico tan interesante, y nos pudiera decir para cuándo ese reconocimiento total a los militares de la República, que tanto lucharon y pasaron en las cárceles, y que saliera esa ley de una vez que los reconociera y pudieran cobrar, en vez de esta limosna de 35.165, y disfrutar de lo que justamente les pertenece, pues ya, por los años que tienen, poco pueden esperar, pues mi marido, el 11 del próximo mes de septiembre, cumplirá 80 años. Yo lo que no considero justo es que se puedan dar miles de millones para cambiar uniformes; miles de millones para ayudar a otros (no estoy en contra de ayudar a nadie), pero primero estamos nosotros; miles de millones para tapar agujeros, muchas veces con mucha basura; en fin, que a ver si Juan Luis, en honor a nuestros 50 años de unión y cariPasa a la página siguiente