ECOLOGÍA

1.000 toneladas de tóxicos esperan en Santander para ser incineradas en el mar

Entre 800 y 1.000 toneladas de residuos químicos procedentes de la industria petroquímica nacional se encuentran almacenados en los depósitos de Terminales Químicos de Santander para su incineración en alta mar, según declararon ayer a EL PAÍS portavoces de la compañía holandesa Ocean Combustion Services (OCS). Las mismas fuentes precisaron que el Vulcanus Il llegará al puerto de Santander a mediados del próximo mes de octubre, momento en que se espera alguna acción de protesta de Greenpeace. Para entonces se habrán acumulado unas 1.500 toneladas de residuos de carácter químico, ...

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Entre 800 y 1.000 toneladas de residuos químicos procedentes de la industria petroquímica nacional se encuentran almacenados en los depósitos de Terminales Químicos de Santander para su incineración en alta mar, según declararon ayer a EL PAÍS portavoces de la compañía holandesa Ocean Combustion Services (OCS). Las mismas fuentes precisaron que el Vulcanus Il llegará al puerto de Santander a mediados del próximo mes de octubre, momento en que se espera alguna acción de protesta de Greenpeace. Para entonces se habrán acumulado unas 1.500 toneladas de residuos de carácter químico, que El Vulcanus tardará unas siete horas en cargar.Al llegar a la zona de incineración, a unas 150 millas al norte, los hornos de a bordo, quemando fuel, alcanzan una temperatura mínima y, posteriormente, los líquidos tóxicos de carácter combustible garantizan, mientras dura la operación de destrucción, una temperatura de 1.200 grados centígrados en las paredes de los tanques y 1.400 en su interior. Los hornos del Vulcanus tienen capacidad para destruir 24 toneladas a la hora.

Por otra parte, José Antonio Madiedo, director de Marina Mercante, declaró en Santander que mucho más tóxico que destruir los residuos en alta mar es "quemar neumáticos en la vía pública". Madiedo confía en que la problemática desaparecerá cuando las fábricas realicen un completo reciclaje de todos los residuos químicos producidos. "La destrucción en el mar de residuos tóxicos", ha declarado, "continuará más allá de 1990".

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