La URSS anuncia que ha puesto fin a la producción de armas químicas

El máximo dirigente soviético, Mijail Gorbachov, en el discurso radiotelevisado que pronunció ayer en Praga señaló: "Puedo informar que la URSS ha puesto fin a la producción de armas químicas. Se sabe que los otros paises del Pacto de Varsovia no han producido nunca estas armas y que jamás las han tenido en su territorio. La Unión Sovíética no tiene armas químicas fuera de su territorio. Por lo que se refiere a las existencias que ya tenemos de estas armas, quiero informar que construiremos una fábrica especial para destruirlas".Gorbachov agregó que la URSS ha preconizado "firmemente la elabor...

El máximo dirigente soviético, Mijail Gorbachov, en el discurso radiotelevisado que pronunció ayer en Praga señaló: "Puedo informar que la URSS ha puesto fin a la producción de armas químicas. Se sabe que los otros paises del Pacto de Varsovia no han producido nunca estas armas y que jamás las han tenido en su territorio. La Unión Sovíética no tiene armas químicas fuera de su territorio. Por lo que se refiere a las existencias que ya tenemos de estas armas, quiero informar que construiremos una fábrica especial para destruirlas".Gorbachov agregó que la URSS ha preconizado "firmemente la elaboración rápida, durante este año, de una convencíón internacional adecuada sobre la prohibición de las armas químicas, y el comienzo de negociaciones activas sobre este problema".

La denominación armas químicas se refiere a aquellas cargas con sustancias tóxicas para uso militar que incapacitan, o matan a las personas.

En un informe de 1982, el Instituto de Estudios Estratégicos de Londres dividía los agentes químicos de estas armas en seis categorías principales por sus efectos: incapacitantes, vomitivos, sofocantes, sanguíneos, causantes de ampollas y neurotóxicos.

La URSS no ha hecho nunca una declaración precisa de su programa de armas químicas, pero diplomáticos occidentales han evaluado entre 200.000 y 500.000 toneladas el volumen de este tipo de armamento en reserva.

Las armas químicas fueron objeto de una convención intemacional firmada en Ginebra el 7 de Junio de 1925. Según dicho acuerdo, los países firmantes se comprometían a no emplear ningún tipo de gas, líquido o sólido que fuese asfixiante, tóxico o que produjese efectos similares. Sin embargo, el acuerdo no prohibía la fabricación ni el almacenamiento. Se ha detectado el uso de armas químicas en las guerras de Afganistán, Birmania, Camboya, Etiopía, Laos y Yemen del Sur, Irán e Irak.