Los acreedores aconsejan a Brasil que solicite la ayuda del FMI

Los Gobiernos de Estados Unidos, Japón y Europa le han dado al ministro brasileño de Hacienda, Dilson Funaro, el mismo consejo: busque la ayuda del Fondo Monetario Internacional (FMI) y diseñen conjuntamente un programa para reformar la economía de Brasil. Funaro ha realizado una gira por EE UU, Europa y Japón para explicar a los Gobiernos de estas zonas la decisión de Brasil de suspender el pago de la deuda.Ese era justo el consejo que el Gobierno brasileño, que se ha apartado de la tutela del FMI, no quería recibir. El Gobierno de José Sarney se ha resistido a solicitar la intervención de es...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Los Gobiernos de Estados Unidos, Japón y Europa le han dado al ministro brasileño de Hacienda, Dilson Funaro, el mismo consejo: busque la ayuda del Fondo Monetario Internacional (FMI) y diseñen conjuntamente un programa para reformar la economía de Brasil. Funaro ha realizado una gira por EE UU, Europa y Japón para explicar a los Gobiernos de estas zonas la decisión de Brasil de suspender el pago de la deuda.Ese era justo el consejo que el Gobierno brasileño, que se ha apartado de la tutela del FMI, no quería recibir. El Gobierno de José Sarney se ha resistido a solicitar la intervención de este organismo, que exige ajustes económicos como contrapartida a su ayuda financiera, ya que cree que las condiciones del Fondo acelerarían la entrada de su país en una recesión.

Durante su viaje, Funaro se ha entrevistado únicamente con representantes gubernamentales y sólo en Japón ha dialogado con los portavoces de los bancos. Brasil suspendió el pasado mes de marzo el pago de los intereses de su deuda externa con los bancos privados, que asciende a 68.000 millones de dólares. La deuda total brasileña se eleva a 108.000 millones de dólares, lo que convierte a Brasil en el país más endeudado del mundo.

En Japón, último destino de su viaje, el ministro brasileño Dilson Funaro sólo recibió manifestaciones de simpatía. Funaro se entrevistó con el ministro de Finanzas japonés, Kiichi Miyazawa, y con el de Comercio, Hajime Tamura. Tras la entrevista, y según informa el Herald Tribune, Miyazawa afirmó: "Se ha de llegar a un acuerdo entre Brasil y el FMI antes de que' nos podamos sentar a negociar créditos nuevos o renegociar las condiciones de los viejos".

Los acreedores

Brasil debe a los bancos japoneses cerca de 11.000 millones de dólares, pero son las entidades norteamericanas las que mantienen un riesgo mayor. La decisión de Brasil de suspender el pago de intereses indefinidamente empeora la situación de los bancos norteamericanos. Según las leyes de EE UU, después de 90 días las deudas no pagadas deben ser consideradas como pérdidas.Asimismo, portavoces del Banco Central brasileño anunciaron ayer que si a finales de marzo no se logra un acuerdo para la renegociación de la deuda externa privada, Brasil podría solicitar un aplazamiento de 90 días en el pago de sus créditos a corto plazo. El próximo 31 de marzo, Brasil deberá pagar 15.000 millones de dólares por el vencimiento de créditos comerciales y líneas interbancarias, informa Efe.

Por otro Jado, altos funcionarios de Washington consideran, según declaraciones recogidas por Reuter, que México podría no alcanzar los objetivos económicos apuntados en su acuerdo con el FMI. El crecimiento económico era la condición impuesta por el FMI y los bancos comerciales para la concesión de préstamos a México.

Archivado En