Pausa de reflexión

El primer ministro francés, Jacques Chirac, ha decidido aplazar hasta el próximo mes de abril la entrada en el Parlamento de todos los proyectos de ley que afectan a reformas sociales, especialmente el código de la nacionalidad y la ley de prisiones privadas. Según portavoces de la mayoría, se trata de obtener una pausa para reflexionar.Queremos reemprender el diálogo con la juventud, pues no se puede gobernar sin ella", dijo Jean Pierre Gaudin, presidente del grupo parlamentario de la Unión Democrática Francesa. En las filas de la Asamblea para la República, sin embargo, se han producido movi...

El primer ministro francés, Jacques Chirac, ha decidido aplazar hasta el próximo mes de abril la entrada en el Parlamento de todos los proyectos de ley que afectan a reformas sociales, especialmente el código de la nacionalidad y la ley de prisiones privadas. Según portavoces de la mayoría, se trata de obtener una pausa para reflexionar.Queremos reemprender el diálogo con la juventud, pues no se puede gobernar sin ella", dijo Jean Pierre Gaudin, presidente del grupo parlamentario de la Unión Democrática Francesa. En las filas de la Asamblea para la República, sin embargo, se han producido movimientos de descontento por los sucesivos retrocesos del Gobierno.

El presidente, François Mitterrand, en unas largas declaraciones transmitidas por la radio, aprobó la política emprendida por Chirac de retirar la Ley de Reforma Universitaria y de aplazar las reformas que afectan directamente a la sociedad.

Mitterrand se permitió, incluso, calificar personalmente a Chirac. "El primer ministro tiene mucha calidad", dijo. Pero no ahorró críticas al ministro del Interior, Charles Pasqua, cuando fue preguntado por sus exaltadas declaraciones del domingo, que justificó por tratarse de una reunión de partido, aunque señaló que en ellas la juventud no podía reconocerse. "Ningún partido puede apropiarse de la República", subrayó el presidente. Para Mitterrand, "a partir de ahora la forma de gestionar los problemas puede y debe cambiar".

El presidente de la República francesa afirmó que, a pesar del retraso, la marcha atrás del Gobierno llega todavía a tiempo. Y rindió homenaje a los estudiantes. "No hay violencia en los jóvenes", dijo, y añadió: "Los jóvenes han dado prueba de madurez. Ha habido actos reprensibles. Pero hay que distinguir entre los jóvenes estudiantes y los alborotadores agentes de la violencia. Quiero agradecer la profunda prudencia de los jóvenes".