De Meer es acusado de conspiracion para la rebelion, delito que el 1 de junio pasa a la justicia ordinaria

Los interrogatorios judiciales a los que ha sido sometido estos días el coronel Carlos de Meer de Ribera, encarcelado desde el pasado viernes, indican que, al jefe militar se le imputa un delito de conspiración para la rebelión, según informan fuentes próximas al detenido. Este delito, que todavía hoy corresponde ser juzgado de acuerdo con el Código de Justicia Militar, pasará el próximo día 1 de junio a la jurisdicción ordinaria, ya que en esa fecha entrarán en vigor el nuevo Código Penal Militar y la denominada ley Puente. Con ambas leyes, todos los delitos relacionados con la rebelión pasan...

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Los interrogatorios judiciales a los que ha sido sometido estos días el coronel Carlos de Meer de Ribera, encarcelado desde el pasado viernes, indican que, al jefe militar se le imputa un delito de conspiración para la rebelión, según informan fuentes próximas al detenido. Este delito, que todavía hoy corresponde ser juzgado de acuerdo con el Código de Justicia Militar, pasará el próximo día 1 de junio a la jurisdicción ordinaria, ya que en esa fecha entrarán en vigor el nuevo Código Penal Militar y la denominada ley Puente. Con ambas leyes, todos los delitos relacionados con la rebelión pasan a la jurisdicción ordinaria. La acusación oficial y concreta contra De Meer será conocida en las próximas horas.

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De acuerdo con las fuentes informantes, el coronel De Meer ha reconocido ante el juez instructor .militar, el coronel José Valenciano Almoyna, que visitó al dirigente libio Muammar el Gaddafi, y no sólo en una ocasión -a finales de enero, como han señalado los servicios españoles de información-, sino al menos dos veces en los últimos años. Amigos del coronel De Meer han comentado que el jefe militar ha estado muchos años destinado en Ceuta y que fue en esa plaza española donde trabó amistad con numerosos árabes de diferentes países norteafricanos.Las fuentes in.forma ntes han indicado que, de acuerdo con comentarios del propio,jefe militar detenido, no es extraño que una persona, militar o no, visite al dirigente libio cuando hace dos años, por ejemplo, el propio presidente del Gobierno español, Felipe González, se entrevistó con Gaddafi en Palma de Mallorca.

Las mismas fuentes han informado que De Meer se considera amigo personal del dirigente libio, al que dice conocer desde hace más de 10 años, y asegura de él que es una persona cuya imagen internacional está siendo distorsionada en los últimos meses. De Meer, según estas fuentes, niega haber pedido a Gaddafi dinero para crear una organización clandestina con fines involucionistas.

José Antonio Assiego, dirigerite ultraderechista que viajó a Trípoli con De Meer, ha reconocido que visitó Libia a finales de enero pasado, pero no precisó en compañía de quién. Assiego fue interrogado también por el juez Valenciano Almoyna.

Expulsión y prisión civil

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El coronel detenido continuaba ayer en la prisión militar de Alcalá de Henares, donde fue visitado por varios familiares yámigos, entre los que figuraba su hija Pilar, abogada, que inicialmente se ha hecho cargo del caso, si bien la familia estudia la posibilidad de que sea otro abogado el quése encargue de la defensa del militar, que también es letrado.

El juez instructor militar, Joaquín Valenciano Almoyna, no interrogó ayer al coronel De Meer, y se encontraba elaborando el informe técnico sobre el que hoy decidirá si procesa o no al jefe militar. En caso de ser procesado, la jurisdicción militar continuará actuando hasta el próximo 1 de junio, fecha en que la causa pasará a la jurisdicción ordinaria.

En caso de que De Meer sea juzgado y condenado por el delito de conspiración, podrá ser condenado a seis años de prisión, y esta pena supondría también su expulsión de las Fuerzas Armadas, ya que tanto el nuevo Código Penal Militar como el Régimen Disciplinano de las Fuerzas Armadas establecen que las penas para los delitos de rebelión, conspiración o proposición de conspiración llevarán aparejadas la expulsión de los ejércitos, previa instrucción de un expediente gubernativo. En este caso, la pena de prisión debería ser cumplida en un establecimiento ordinario -no militar-, aunque separadamente del resto de reclusos.

El juez militar instructor intervino como relator en el proceso contra los golpistas que participaron en el asalto al Congreso el 23 de febrero de 1981. En los círculos militares más conservadores, Valenciano Almoyna ha sido fuertemente criticado.

En medios de Defensa se afirmó ayer que no existe ningún indicio para pensar que en las acciones que desarrollaba el coronel De Meer estuvieran implicados otros militares.

Con respecto a los 10 terroristas de cinco países detenidos en los últimos días en España, fuentes policiales señalaron ayer que los servicios de información están recopilando pruebas de sus conexiones con funcionarios libios destinados en Madrid.

Los terroristas, integrados en una organización denominada La Llamada de Jesucristo, tuvieron contactos, según las fuentes informantes, con algunos , libios ya expulsados y con otros funcionarios que continúan en España.

Los 10 detenidos, según esas fuentes, ingresarán hoy en prisión.

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