El 'ultra" Cicuttini intentó agredir a dos periodistas antes de la vista de su extradición
El ultraderechista italiano Carlo Cicuttini, relacionado con algunos medios de la guerra sucia contra ETA, y su esposa, María Fernanda Fontanals, de nacionalidad española, insultaron e intentaron ayer agredir a un fotógrafo y a un redactor de Diario 16 cuando éstos pretendían fotografiarles poco antes de que se iniciara la vista de extradición, que ha sido solicitada por las autoridades italianas.La discusión la inició la esposa de Cicuttini, que insultó y empujó a Carlos Miralles, fotógrafo de Diario 16. Melchor Miralles, redactor del rotativo y hermano del fotógra...
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El ultraderechista italiano Carlo Cicuttini, relacionado con algunos medios de la guerra sucia contra ETA, y su esposa, María Fernanda Fontanals, de nacionalidad española, insultaron e intentaron ayer agredir a un fotógrafo y a un redactor de Diario 16 cuando éstos pretendían fotografiarles poco antes de que se iniciara la vista de extradición, que ha sido solicitada por las autoridades italianas.La discusión la inició la esposa de Cicuttini, que insultó y empujó a Carlos Miralles, fotógrafo de Diario 16. Melchor Miralles, redactor del rotativo y hermano del fotógrafo, acudió a separarles, y fue empujado a su vez por Cicuttini. Ante los intentos de agresión y los fuertes insultos procedentes de la pareja, la policía de servicio en la Audiencia intervino para imponer el orden.cb0
La justicia italiana reclama a Cicuttini por la colocación de explosivos en el chalé del diputado del Movimiento Social Italiano (MSI), de tendencia ultraderechista, Michele Ferruccio, en 1972. Cicuttini fue acusado de este delito, cometido en la localidad de Udine, por el también ultra Vinciguerra, y está reclamado por un juez de Venecia. Cicuttini fue detenido por primera vez en España a finales de 1972, y en 1983 fue denegada una primera solicitud de extradición formulada por Italia, debido a que la Audiencia Nacional entendió que los delitos por los que Cicuttini era reclamado eran de naturaleza política.
El italiano se negó a ser entregado a las autoridades de su país y afirmó ante el tribunal que los hechos de que le acusan son falsos y que es víctima de una persecución política, debido a que el juez que ha pedido su extradición es simpatizante de la izquierda extraparlamentaria.
El fiscal Manuel Villanueva señaló que, de los tres delitos por los que Cicuttini es reclamado -tenencia de explosivos, estragos y asociación ilícita-, procedía su entrega por los dos primeros, pero no por el último. El fiscal precisó que Cicuttini está acusado de hechos terroristas en Italia y que no se le puede aplicar la ley de amnistía española.El defensor argumentó que tanto en esta ocasión como cuando se formuló la primera petición de extradición se trata de delitos de intencionalidad política que están amnistíados o prescritos.
Fuentes italianas señalan que Cicuttini perteneció a los grupos neofascistas Ordine Nuovo, Vanguardia Nacionale y MSI. Llegó a España en 1972, donde mantuvo relaciones con los también ultras Stefano della Chiae, Giuseppe Calzona y Piero Carmassi, entre otros, que han sido relacionados en alguna ocasión con la guerra sucia contra ETA.
La primera petición de extradición formulada por Italia reclamaba a Cicuttini por colaborar en el secuestro de un avión, y como sospechoso de haber participado en un atentado en el que murió un brigada de carabineros y resultó gravemente herido un subteniente.