Reportaje:

Woody Allen y las mujeres

El director norteamericano estrena en Nueva York su última película, 'Hannah y sus hermanas'

La última película de Woody Allen, Hannah y sus hermanas, acaba de estrenarse en Nueva York. Presenta el reparto más extenso de actores reconocidos que haya dirigido jamás: Carrie Fisher, Mia Farrow, Barbara Hershey, Diarme Wiest, Maureen O'Sullivan, Michael Caine, Lloyd Nolan y Max von Sydow. En el filme, Allen explora la vida de tres hermanas, como ya lo hiciera en Interiores (1978). La relación del director de Bananas con las mujeres, sus condiciones de director de actrices e incluso su punto de vista "desde los personajes femeninos", son síntomas de una peculiar relación que la autora de e...

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La última película de Woody Allen, Hannah y sus hermanas, acaba de estrenarse en Nueva York. Presenta el reparto más extenso de actores reconocidos que haya dirigido jamás: Carrie Fisher, Mia Farrow, Barbara Hershey, Diarme Wiest, Maureen O'Sullivan, Michael Caine, Lloyd Nolan y Max von Sydow. En el filme, Allen explora la vida de tres hermanas, como ya lo hiciera en Interiores (1978). La relación del director de Bananas con las mujeres, sus condiciones de director de actrices e incluso su punto de vista "desde los personajes femeninos", son síntomas de una peculiar relación que la autora de este artículo, de The New York Times, ha rastreado entre las mujeres elegidas por Woody Allen.

¿Por qué las mujeres de Woody son neuróticas, excitantes e ingeniosas? Son el tipo de mujer que puede apreciar la clase de hombre que habla sobre la insensatez de la vida, los adenoides, las úlceras, el seconal, Sócrates, la masturbación, Nietzsche y los hermanos Marx, y todo al mismo tiempo. Como escritor, Woody Allen crea personajes femeninos poco comunes, y, como director, extrae de sus actrices actuaciones poco frecuentes y hace que se vean cálidas, originales y cautivadoras. Carrie Fisher, que trabajó con Allen por primera vez en su nueva película, Hannah y sus hermanas, explicó cómo logra alcanzar esta armonía tan especial con las mujeres: "A través de la intimidación", dice, con picardía. "Sin duda, esto me hace sentir más femenina". Ahora responde con más seriedad: "Parece gustar de las mujeres. Y gusta de ellas por buenas razones, no por su figura y apariencia, aunque también le gusta esto. Cuando estás con alguien como Woody Allen -y no existen muchas personas como él- quieres estar lo mejor posible. Debe ser una especie de sensación orgánica".

Allen siempre ha mostrado fascinación por las mujeres, por la relación entre ellas y con los hombres. Exploró la vida de tres hermanas en su primer drama cinematográfico, Interiores, en 1978, y lo ha hecho otra vez, con más elementos de comedia, en Hannah y sus hermanas. Allen dice que primero pensó el título de su nueva película y luego escribió en tomo a él. "Pensé que sería, divertido trabajar otra vez sobre el tema de las hermanas", dice. "Comencé a incorporar al personaje sólo como una ocurrencia".

Gloria neurótica

Su película, la número 14, devuelve a Allen a la pantalla en toda su gloria neurótica. ("Me divertí a lo grande", le dice a una chica que lo arrastra a un club de moda. "Igual que en los juicios de Nuremberg".) Presenta el reparto más extenso de actores reconocidos que haya dirigido jamás, que incluye a Fisher, Mia Farrow, Barbara Hershey, Dianne Wiest, Maureen O'Sullivan, Michael Caine, Lloyd Nolan y Max von Sydow.

Sus mujeres se mueven en una contradanza a lo largo del terreno emocional de los temas favoritos de Allen: la vida, la muerte, el amor, la lujuria, los celos y la culpa. "Son a la vez despreciables y protectoras entre sí", dice Fisher. "En cierto modo es humano. Hacen cosas terribles a espaldas de las otras, y después se muestran una gran dulzura".

"Siento una atracción tremenda por las películas, las obras de teatro o los libros que exploran la psiquis de las mujeres, en particular de las que son inteligentes", dice el director. "Sus sentimientos, sus impulsos, sus problemas y sus elementos de fortaleza siempre me resultan muy interesantes. Cuando Mary McCarthy escribió The group no pude esperar para leerlo, o la novela de Richard Yates Easter Parade".

Dice que disfruta más dirigiendo a las mujeres y escribiendo para ellas que para los hombres. "Pienso acerca de las cosas desde el punto de vista de personajes femeninos", dice. "Muy rara vez pienso desde el punto de vista de personajes masculinos, excepto para mí". Allen ha dicho que también se ve a sí mismo en la mayoría de sus personajes femeninos.

Cuando le preguntaron cómo llegó a desarrollar un ánima tan fuerte, sugirió que tal vez la causa se encuentre en que "fue el único varón en una familia de muchísimas mujeres. Tenía una hermana, muchas primas y una madre con siete hermanas. Siempre estabi rodeado de mujeres".

Compañera fuera de la pantalla

Mia Farrow, quien interpreta al personaje del título de la película y es la compañera de Afien fuera de la pantalla, siente que él es un buen director con las mujeres porque no siente que éstas son inescrutablers o intimidadoras. "Creo que Woody comprende y se preocupa por la manera en que piensa", dice Farrow, mientras se sienta sobre el suelo de la habitación de montaje de Allen junto con su hija adoptada, Dylan O'Sullivan Farrow.

"Se ven muchos directores de películas de acción, directores de hombres que tratan con persecuciones automovilísticas, explosivos, historias de espías y cosas por el estilo", dice en un tono de voz suave y elegante. "Las películas de Woody se ocupan más de las personas y de la manera en que éstas se comportan y piensan, y esto incluye a las mujeres en una proporción muy interesante".

La madre de Farrow, Maureen O'Sullivan, quien interpreta el papel de su madre en la película, comparó favorablemente a Woody con George Cukor, quien era muy conocido en Hollywood por su talento para dirigir actrices. O'Sullivan fue dirigida por Cukor en la versión de 1935 de David Copperfield, en la que ella hacía el papel de Dora. "George tenía una idea preconcebida y hacía que uno concretara su concepto de lo que quería", recordaba O'Sullivan.

O'Sullivan es la madre, "una vieja coqueta y borrachina con una boca sucia", según se describe ella misma. Farrow interpreta a Hannah, la hermana mayor, una actriz de éxito que, según la opinión de sus hermanas, es "repugnantemente perfecta". Wiest hace el papel de Holly, la hermana que está celosa de Hannah porque su vida amorosa y su carrera como actriz van a empujones. Hershey es Lee, la tercera hermana, quien tiene una aventura con el marido de Hannah. Carrie Fisher es una amiga a quien, desesperada por un hombre soltero que no se parezca a Ichabod Crane, se apropia del novio de Holly.

"El corazón", como lo expresa el personaje de Afien, "es un!musculito muy pero que muy elástico". Durante algunas entrevistas, las actrices de Hannah contaron cómo fue trabajar con el director que se ha convertido en un ídolo norteamericano. "Lo primero que dice es que si no te sientes cómoda intentes cambiar la situación", dice Dianne Wiest, en su tono susurrante de niña pequeña. "De modo que allí hay algo importante. Nada importante, pequeñas cositas que estorban, como, por ejemplo, cambiar el verbo y el sustantivo o agregar ¿entiendes', ¿entiende?".

Director 'zen'

Farrow dice: "Woody no habla mucho acerca de sus ideas para interpretar los papeles que él ha escrito. Se supone que pongas la parte inicial y luego, si vas por mal camino, él te lo señalará en seguida. Es muy específico cuando no lo estás haciendo bien. Si vas bien, simplemente te deja que sigas".

Su madre asintió. "Con cantidad de directores uno hace preguntas estúpidas, como '¿debo sostener un vaso aquí?', o '¿debo sentarme aquí?', pero con Woody sólo lo haces. Si él no quiere que lo hagas, entonces te lo dirá".

Fisher describe su estilo como "zen, la libertad a través de la limitación. Es el único director zen que teneinos". Ella recuerda que en su primera escena, donde llega a una fiesta y pregunta dónde están los hombres solteros interesantes, Allen inmediatamente la llevó a un lado y le dijo que no lo estaba haciendo bien. "Él pensaba que estaba sonriendo demasiado y que gesticulaba como una anciana judía", dijo Fisher. "Me dijo: 'Estás entrando como mi tía Velma', y me mostró cómo se movía su tía Velma".

En su búsqueda de darle a sus películas una sensación naturalista, aconseja la "superposición", o sea, hablar al mismo tiempo, interrumpiendo y reaccionando frente a lo que los demás dicen. "En otra película, uno tal vez sólo le presta atención a una persona mientras habla", dice Farrow. "Woody, en cambio, saldría a decir: 'No te quedes simplemente oyendo en forma pasiva. Debes responder para que se te oiga".

"Muchas veces nota que en las películas de televisión los actores nunca condensan las palabras. Dicen "I can not" en vez de "I can't". Y, en seguida, dice que eso es una señal de mala actuación. Está claro, en la vida real las personas no hablan de esa manera".

Las actrices dicen que tiene una gran habilidad para quitar cualquier cosa en la configuración del discurso que suene falso. "Tiene un oído tan increíble para todo lo que no sea verdadero, que simplemente lo reconoce", dice Farrow.

Si siente que están cayendo en una imitación subconsciente de un tartamudeo neurótico al estilo de Diane Keaton, en seguida le pondrá punto final. "En una oportunidad yo estaba tartamudeando de esa manera", recuerda Fisher, "y me detuvo para decirme: 'No hagas eso, di toda la oración sin hacer pausas".

"A mí me dijo que dejara de decir 'mm mm", contó Hershey.

El estilo naturalista se realza por la manera como Allen filma sus escenas, dice Farrow. "Otros directores aborrecen la superposición porque destruye su habilidad para interrumpir la película de una manera convencional, con temas de primer plano y escenas sobre el hombro. Pero la manera de Woody es dejar la cámara rodando en largas tomas maestras, que cubren toda la escena en un movimiento fluido, y esto implica provocar que a veces surja un diálogo atmosférico en vez de un intercambio pertinente". "De modo que uno se puede comportar normalmente. Si ahora nos estuviera filmando mientras hablamos, lo que estaríamos haciendo es justamente superposición".

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