Dinamarca fracasa en sus gestiones para que se renegocie la reforma comunitaria

El ministro de Asuntos Exteriores de Dinamarca, Uffe Elleman Jensen, que ayer culminó en La Haya una gira relámpago por cinco paises de la Comunidad Europea (CE), ha fracasado en su intento de convencerles para que se renegocie el paquete de reformas comunitarío, tal como exigía la moción socialdemócrata aprobada el pasado martes en el Folketing (Parlamento) de Copenhague.Aunque el resultado final de las consultas del ministro debe ser debando en el Parlamento danés el próximo martes, fuentes de la socialdemocracia han adelantado ya su nueva negativa, a pesar de las garantías ofrecidas por los...

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El ministro de Asuntos Exteriores de Dinamarca, Uffe Elleman Jensen, que ayer culminó en La Haya una gira relámpago por cinco paises de la Comunidad Europea (CE), ha fracasado en su intento de convencerles para que se renegocie el paquete de reformas comunitarío, tal como exigía la moción socialdemócrata aprobada el pasado martes en el Folketing (Parlamento) de Copenhague.Aunque el resultado final de las consultas del ministro debe ser debando en el Parlamento danés el próximo martes, fuentes de la socialdemocracia han adelantado ya su nueva negativa, a pesar de las garantías ofrecidas por los otros países comunitarios en materia laboral y de protección del medio ambiente, y criticaron entre otras cosas el carácter meramente verbal de estas garantías. Asimismo, insisten -en contra de lo que dice el ministro- en que la reforma otorga mayores poderes al Parlamento europeo y, por lo tanto, reduce la soberania danesa.

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Si bien la confirmación de la convocatoria del referéndum sobre el paquete comunitario sólo se puede hacer oficial tras la sesión parlamentaria del martes, en fuentes oficiosas se da por segura la fecha del jueves 27 de febrero.

Las mismas fuentes de la oposición confirman que el Gobierno cuenta ya con el necesario consentimiento del Partido Socialdemócrata para la aprobación, por el precedimiento de urgencia, de las leyes que, sean precisas para celebrar un referéndum consultivo. Ni la Constitución ni la legislación danesa reconocen el referéndum no vinculante.

Europa consideraría un no del pueblo danés a la reforma del Tratado de Roma como un primer paso para abandonar la Comunidad Europea, pero el Gobierno de Dinamarca está convencido de que será un lo que salga del referéndum. Con estas palabras resumió su gira europea, a falta de su escala de ayer en La Haya, Uffe Ellemann Jensen, donde pretendió en vano que la fecha prevista por la presidencia holandesa para firmar la reforma se retrasara hasta después de la consulta popular.

"Nuestros colegas europeos no ven ventaja alguna" para Dinamarca en una nueva negociación de la reforma, porque "contiene suficientes concesiones para nuestro país", afirmó el ministro.

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El referéndum se centrará "en la aceptación del paquete" de medidas y no en la permanencia de Dinamarca en la Comunidad, aseguróel ministro danés, al tiempo que descartó que una respuesta negativa tuviera que desembocar necesariamente en la convocatoria de elecciones anticipadas, porque el Gobierno de Poul Schluter "intentaría sacar el mejor partido posible" para Dinamarca en la nueva situación.

El Gobierno da por descontado el sí, basándose en recientes encuestas que revelan una mayoría de partidarios de la reforma, incluso entre los socialdemócratas. El ministro resaltó la "preocupación de los colegas nórdicos", al considerar a Dinamarca como un "elemento de equilibrio" y de unión entre la CE y el resto de Escandinavia.

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