México firma con la banca internacional la refinanciación de 48.700 millones de dólares, el 50% de su deuda externa

México ha llegado a un acuerdo financiero con la banca internacional para la reestructuración de cerca de 48.700 millones de dólares (más de 7,9 billones de pesetas) cifra equivalente a cerca de la mitad de su deuda externa. El acuerdo, firmado el jueves, comprende 20.100 millones de dólares de la deuda pública mexicana, con vencimientos entre 1985 y 1986, y completa la reestructuración de otros 23.600 millones de dólares (1982-1984) pactada en marzo último. Ésta es la refinanciación más importante registrada en la historia crediticia mundial

El ministro de Finanzas, Jesús Silva-Her...

México ha llegado a un acuerdo financiero con la banca internacional para la reestructuración de cerca de 48.700 millones de dólares (más de 7,9 billones de pesetas) cifra equivalente a cerca de la mitad de su deuda externa. El acuerdo, firmado el jueves, comprende 20.100 millones de dólares de la deuda pública mexicana, con vencimientos entre 1985 y 1986, y completa la reestructuración de otros 23.600 millones de dólares (1982-1984) pactada en marzo último. Ésta es la refinanciación más importante registrada en la historia crediticia mundial

El ministro de Finanzas, Jesús Silva-Herzog, ha manifestado que la conclusión del proceso de refinanciación es "un paso en la dirección correcta", aunque advirtió que "no es la solución al problema de la deuda externa. La solución de los problemas financieros externos de México y otros países latinoamericanos", señaló Silva Herzog, "no reside únicamente en acuerdos entre países deudores y bancos acreedores, sino en un acercamiento más amplio a los conceptos interrelacionados de las relaciones comerciales, financieras y económicas con los países industrializados". Jesús Silva advirtió también que su país y el resto de los deudores necesitan nuevos flujos de capital para promover el crecimiento económico. "Aún están por discutirse fórmulas que aseguren tanto el crecimiento económico como el servicio de la deuda", aseguró el ministro mexicano, para quien "no es posible continuar pidiendo sacrificios al pueblo mexicano sin ofrecer a cambio un futuro mejor".

Advertencia mexicana

Dentro del clima relajado de la ceremonia de firma, las palabras del ministro mexicano fueron interpretadas como una advertencia acerca de los límites futuros de las relaciones entre el mundo industrializado y los países subdesarrollados. "Para encontrar las mejores soluciones debemos trabajar más para reducir la brecha que existe hoy con respecto a la diagnosis de la situación", aseguró Silva.

Precisó que la mayoría de los Estados industrializados "están diciendo que el problema de la deuda puede ser resuelto mediante nuestros ajustes económicos y sus niveles de crecimiento y política de fronteras abiertas, pero estas condiciones, además de no estarse produciendo, son insuficientes".

El vicepresidente del Citibank y jefe del comité asesor de bancos, William Rhodes, afirmó durante la ceremonia de la firma del acuerdo que éste "prepara el camino para el retorno de México durante el año próximo al mercado monetario".

La banca, contentaJosé Gurría, uno de los directores del Ministerio mexicano de Finanzas, adelantó a los periodistas que su país contraerá nuevos créditos por "2.000 o 3.000 millones de dólares" el año entrante.

Para el ministro mexicano debe ser reexaminada toda la situyación del comercio, tanto en el precio de las exportaciones que efectúan los países en vías de desarrollo, como su acceso a los mercados de las naciones ricas para la zona", añadió Silva Herzog, "es vital la reanudación del flujo crediticio, puesto que no debemos alvidar que el pago de intereses está ligado a la concesión de nuevos créditos. Estamos hablando de un tema realmente explosivo".