El Gobierno no piensa responder agresivamente al embargo contra Nicaragua, afirma González

España no piensa responder agresivamente al embargo decretado por Estados Unidos contra Nicaragua y mantendrá inalterables sus relaciones con este país centroamericano, afirmó el presidente del Gobierno español, Felipe González, en una conferencia de prensa que ofreció ayer en el palacio de la Moncloa junto al presidente nicaragüense, Daniel Ortega. González descartó la posibilidad de que España proporcione ayuda militar a Nicaragua. En presencia de González, Ortega calificó al presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan, de "nazi" y "asesino".

Daniel Ortega llegó a Madrid ayer al medio...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

España no piensa responder agresivamente al embargo decretado por Estados Unidos contra Nicaragua y mantendrá inalterables sus relaciones con este país centroamericano, afirmó el presidente del Gobierno español, Felipe González, en una conferencia de prensa que ofreció ayer en el palacio de la Moncloa junto al presidente nicaragüense, Daniel Ortega. González descartó la posibilidad de que España proporcione ayuda militar a Nicaragua. En presencia de González, Ortega calificó al presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan, de "nazi" y "asesino".

Más información

Daniel Ortega llegó a Madrid ayer al mediodía, procedente de la República Democrática Alemana -última escala de su gira por los países del Este-, acompañado de sus ministros de Exteriores, Miguel D'Escoto; Comercio Exterior, Alejandro Martínez, e Información, Manuel Espinosa. En Barajas esperaban a la delegación nicaragüense el presidente del Gobierno español, Felipe González, y el ministro de Asuntos Exteriores, Fernando Morán.El presidente del Gobierno español, acompañado de su esposa, Carmen Romero, ofrecieron un almuerzo en la bodeguilla de la Moncloa a Daniel Ortega y a su esposa, Rosario Murillo. Allí, según relató posteriormente Felipe González, conversaron sobre los problemas de Centroamérica y las relaciones bilaterales. El menú fue más sencillo que el ofrecido al presidente estadounidense, Ronald Reagan, cuatro días antes: salpicón de marisco, pierna de cordero y macedonia de frutas.

Coincidencia con el pluralismo

Después del almuerzo, González y Ortega ofrecieron una conferencia de prensa, que comenzó con unas palabras del presidente del Gobierno español expresando sus deseos de mantener sus relaciones de cooperación con Nicaragua "más allá de cualquier coyuntura". Igualmente, González reiteró su coincidencia con el proyecto original pluralista de la revolución nicaragüense."Creo que es necesario que haya un entendimiento entre Estados Unidos y Nicaragua", afirmó más adelante Felipe González.

Durante la conferencia de prensa celebrada en la Moncloa, Ortega tuvo palabras muy duras para el presidente de Estados Unidos, a quien calificó de "nazi" y "ases¡ no", y le acusó de haber matado a 150 niños nicaragüenses menores de 16 años y de querer convertir a Nicaragua en "un campo de concentración".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Después de esta intervención de Ortega -que Felipe González había seguido con gesto severo-, el presidente del Gobierno español afirmó que para lograr una desescalada de la tensión en Centroamérica "también. sería bueno tener una desescalada verbal para intentar encontrar la vía del diálogo y del entendimiento".

"Nosotros tenemos una relación con Nicaragua, que se mantendrá", afirmó posteriormente González. "Nuestra actitud no va a ser una actitud de respuesta en el sentido agresivo a Estados Unidos por su embargo contra Nicaragua", añadió. Según González, España va a mantener su cooperación con Nicaragua en base a los dos criterios por los que se regía hasta ahora: "Un criterio de solidaridad o ayuda humanitaria y un criterio de intercambio en función de los intereses nacionales". "Si hasta ahora", añadió, "no ha habido una relación en materia militar no tiene por qué haberla ahora".

Tras acabar la conferencia de prensa, Daniel Ortega marchó a la residencia de su embajador en Madrid, donde se entrevistó, entre otros dirigentes de la izquierda española, con los secretarios generales del PCE, Gerardo Iglesias CC OO Marcelino Camacho, UGT, Nicolás Redondo.

Archivado En