La URSS acepta someter a inspección internacional parte de sus instalaciones nucleares

La Unión Soviética firmará hoy un acuerdo con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) por el que someterá parte de sus instalaciones nucleares a inspecciones regulares de este organismo de las Naciones Unidas. Según informó ayer un portavoz de la OIEA, el acuerdo será firmado hoy en la sede del organismo en Viena por Andrei Petrosiants, presidente del Comité Estatal de Utilización de Energía Atómica de Moscú, y el director general de la OIEA, Hans Blix.Con la firma del acuerdo, la Unión Soviética se somete por primera vez al sistema de salvaguardias de este organismo in...

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La Unión Soviética firmará hoy un acuerdo con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) por el que someterá parte de sus instalaciones nucleares a inspecciones regulares de este organismo de las Naciones Unidas. Según informó ayer un portavoz de la OIEA, el acuerdo será firmado hoy en la sede del organismo en Viena por Andrei Petrosiants, presidente del Comité Estatal de Utilización de Energía Atómica de Moscú, y el director general de la OIEA, Hans Blix.Con la firma del acuerdo, la Unión Soviética se somete por primera vez al sistema de salvaguardias de este organismo internacional, que tiene como objeto el control de las instalaciones nucleares dedicadas oficialmente a usos pacíficos.

Estas inspecciones intentan evitar que material radiactivo y tecnología dedicados a la industria nuclear civil sean desviados hacia fines militares.

La OIEA, fundada en 1957 para fomentar el uso pacífico de la energía nuclear, cuenta con 112 países miembros. Una de sus actividades principales es el envío de inspectores técnicos para controlar con qué fines se utiliza el combustible nuclear. Los países miembros que ya disponían de armamento nuclear cuando ingresaron en el organismo no están obligados a someterse a las salvaguardias. No obstante, Estados Unidos, el Reino Unido y Francia se someten voluntariamente a estas inspecciones. El sistema de control es una de las principales reglamentaciones del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP), firmado por 120 países -no por España-, que deberá ser revisado en septiembre de este año.

El TNP es producto de un acuerdo entre las potencias nucleares para evitar que otros países desarrollen armas nucleares.

Tras la firma soviética del acuerdo de salvaguardias, China es el único país con potencial nuclear militar declarado que no somete sus instalaciones civiles a la inspección del OIEA. China, que ingresó el pasado año en la OIEA se niega a firmar el Tratado de No Proliferación. Según Pekín, el TNP está en contra de los intereses del Tercer Mundo, ya que su principal objetivo es mantener el monopolio de las armas nucleares en poder de los países industrializados. El texto de los acuerdos de inspección de la OIEA es secreto y, en los casos de países con armamento nuclear, sólo suele afectar a una parte de las instalaciones nucleares con fines civiles.

Por otra parte, China ha aceptado, por primera vez, iniciar negociaciones para la prohibición de pruebas nucleares en el marco de las conversaciones sobre desarme que se desarrollan en la ciudad suiza de Ginebra.

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