Cooperación de EE UU y la URSS en las sondas Vega que van al encuentro del cometa Halley

Gracias a un inusual acuerdo de cooperacion científica negociado discretamente por científicos norteamericanos y soviéticos, la sonda soviética Vega 1 transporta un analizador de polvo de fabricación norteamericana, anunció el jueves John Simpson, físico de la universidad de Chicago.

La sonda fue lanzada el sábado pasado desde la URSS y se dirige hacia una cita con el cometa Halley, prevista para 1986. Una sonda gemela, la Vega 2, que fue lanzada ayer, transportará otro analizador diseñado por el astrofísico John Simpson. Otros científicos norteamericanos tienen cargos importantes en la...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Gracias a un inusual acuerdo de cooperacion científica negociado discretamente por científicos norteamericanos y soviéticos, la sonda soviética Vega 1 transporta un analizador de polvo de fabricación norteamericana, anunció el jueves John Simpson, físico de la universidad de Chicago.

La sonda fue lanzada el sábado pasado desde la URSS y se dirige hacia una cita con el cometa Halley, prevista para 1986. Una sonda gemela, la Vega 2, que fue lanzada ayer, transportará otro analizador diseñado por el astrofísico John Simpson. Otros científicos norteamericanos tienen cargos importantes en la misión soviética. Un astrónomo de la universidad de Arizona es miembro del equipo de análisis de imágenes, y un físico de esa misma universidad diseñó otros intrumentos importantes de la sonda. En el programa también participa un investigador de la universidad de Michigan.Esta colaboración entre científicos soviéticos y norteamericanos se produce en un momento en que aumenta la rivalidad y el secreto en torno a la aventura espacial de ambas potencias. El acuerdo sobre cooperación espacial firmado por la URSS y EEUU en 1972, que permitió el acoplamiento de las naves Sojuz y Apolo, expiró en 1982 por deseo del presidente Ronald Reagan, en respuesta a la declaracion de la ley marcial en Polonia.

Los científicos norteamericanos y soviéticos negociaron discretamente con sus respectivos Gobiernos, y para no llamar la atención utilizaron como intermediario de sus negociaciones un instituto de investigación de la República Federal de Alemania.

Archivado En