La URSS impone un embargo de combustible al Reino Unido en apoyo a los mineros en huelga
La Unión Soviética ha decidido suspender por tiempo indefinido todos sus suministros de combustible al Reino Unido, en solidaridad con los mineros británicos en huelga. La decisión, anunciada oficialmente por televisión el lunes, ha sido tomada por los sindicatos de la URSS, cuyos miembros no cargarán ningún buque que transporte hulla o petróleo al Reino Unido.La iniciativa de los sindicatos fue aprobada por las organizaciones del comercio exterior soviético, que incumplirán así los contratos que tenían firmados con Londres. La Unión Soviética había exportado al Reino Unido en 1983, petróleo p...
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La Unión Soviética ha decidido suspender por tiempo indefinido todos sus suministros de combustible al Reino Unido, en solidaridad con los mineros británicos en huelga. La decisión, anunciada oficialmente por televisión el lunes, ha sido tomada por los sindicatos de la URSS, cuyos miembros no cargarán ningún buque que transporte hulla o petróleo al Reino Unido.La iniciativa de los sindicatos fue aprobada por las organizaciones del comercio exterior soviético, que incumplirán así los contratos que tenían firmados con Londres. La Unión Soviética había exportado al Reino Unido en 1983, petróleo por valor de 530 millones de dólares (unos 90.000 millones de pesetas), cantidad que este año tenía tendencia a aumentar. Desde el comienzo de la huelga de los mineros británicos, los medios oficiales soviéticos y los sindicatos de la URSS han expresado su solidaridad con los huelguistas y criticado duramente a la primera ministra Margaret Thatcher.
El anuncio ha coincidido con una firme condena de las sanciones comerciales como medio de presión política formulada por el primer ministro soviético, Nikolai Tijonov, en la cumbre que el CAME (Mercado Común de los países socialistas) celebra en La Habana, por lo que el embargo ha sorprendido en medios diplomáticos occidentales de la capital soviética. La Prensa soviética no se ha hecho eco del boicoteo, pero el hecho de que se anunciara destacadamente en televisión no deja dudas sobre el apoyo que tal medida tiene en el Kremlin. "Con esta técnica se evita hacer declaraciones de alto nivel y con ello evadir las críticas internacionales", señalan medios occidentales.
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