Indicios de recuperación de una crisis histórica

El nuevo presidente de Ecuador, León Febres Cordero, recibirá como herencia un país que ha comenzado a recuperarse económicamente, tras haber pasado en los primeros años de la presente década por la peor crisis de su historia.Tras muchos años de crecimiento sostenido de su producto interior bruto (PIB), éste tuvo en 1983 una caída del 3,3%, en la que influyeron la disminución de la actividad económica y las graves inundaciones que arrasaron el país. Para este año está previsto un crecimiento del PIB del orden del 2%. Una deuda externa que se sitúa en 7.000 millones de dólares, pero que está re...

El nuevo presidente de Ecuador, León Febres Cordero, recibirá como herencia un país que ha comenzado a recuperarse económicamente, tras haber pasado en los primeros años de la presente década por la peor crisis de su historia.Tras muchos años de crecimiento sostenido de su producto interior bruto (PIB), éste tuvo en 1983 una caída del 3,3%, en la que influyeron la disminución de la actividad económica y las graves inundaciones que arrasaron el país. Para este año está previsto un crecimiento del PIB del orden del 2%. Una deuda externa que se sitúa en 7.000 millones de dólares, pero que está refinanciada en los vencimientos de este año permitirá al nuevo Gobierno encarar la gestión económica sin agobios. El petróleo proporciona el 70% de las divisas que ingresa Ecuador por exportaciones. La producción actual es de 260.000 barriles diarios, de los que 150.000 se exportan.

Pero el principal enemigo del nuevo Gobierno estará en el Congreso, en el que la oposición tiene mayoría, y en las organizaciones sindicales, que han anunciado ya que el nuevo Gobierno es "enemigo de los trabajadores".

La acusación se basa en la convicción de que el Gobierno de Febres Cordero responderá a las directrices económicas del neoliberalismo y en el recuerdo de las críticas que el nuevo presidente hizo en el pasado a los incrementos salariales decididos por el Gobierno de Osvaldo Hurtado.