Hacienda modificará la fiscalidad del petróleo sin aumentar la carta para los consumidores

El Ministerio de Economía y Hacienda tiene redactado un decreto-ley y varias disposiciones complementarias para adaptar la fiscalidad de los petróleos a la desaparición del monopolio de Campsa. A partir del próximo verano, las importaciones serán sometidas a un impuesto de compensación de gravámenes interiores que recaudará al año cerca de 60.000 millones de pesetas. Pero fuentes de toda solvencia han asegurado que existe la decisión de no utilizar la adaptación para cargar mayores costes en los consumidores.El decreto-ley ha sido ultimado con el propósito de que en las próximas semanas inicie...

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El Ministerio de Economía y Hacienda tiene redactado un decreto-ley y varias disposiciones complementarias para adaptar la fiscalidad de los petróleos a la desaparición del monopolio de Campsa. A partir del próximo verano, las importaciones serán sometidas a un impuesto de compensación de gravámenes interiores que recaudará al año cerca de 60.000 millones de pesetas. Pero fuentes de toda solvencia han asegurado que existe la decisión de no utilizar la adaptación para cargar mayores costes en los consumidores.El decreto-ley ha sido ultimado con el propósito de que en las próximas semanas inicien los trámites previos a su aprobación por el Consejo de Ministros. Las primeras estimaciones señalan que el erario público obtendrá 25.000 millones de pesetas en lo que resta de año. Para el primer ejercicio completo de aplicación, la recaudación ha sido evaluada en al menos 57.000 millones de pesetas.

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Sin embargo, los nuevos recursos fiscales serán compensados por la disminución de ingresos que se ha previsto con motivo de la desaparición del monopolio de Campsa, que ha proporcionado al Estado una renta discontinua, inexistente en algunos años, como 1982. Durante el pasado ejercicio, los ingresos por este concepto fueron 75.600 millones de pesetas, sobre un total de 106.000 procedente del conjunto de monopolios fiscales.

Según fuentes de Hacienda, la operación se pretende hacer como un mero ajuste contable, sin repercusión en los precios finales.

Estudios del Gobierno

Con motivo del reciente estudio de medidas para reducir el déficit público este año en unos 300.000 millones de pesetas, el Gobierno ha descartado las propuestas formuladas para otra subida directa de las gasolinas, adicional a la de diciembre pasado. El decreto-ley y las disposiciones citadas han sido estudiados en el mismo paquete.El desarrollo de la instrumentación técnica del decreto-ley únicamente está pendiente de aclarar la situación de las refinerías que importan crudos de petróleo para luego exportar productos tratados (el proceso se denomina maquila), pues gozan de regímenes similares a los de zona franca. Ello planteará probablemente ajustes en la desgravación fiscal a la exportación, que el año pasado se aproximó a los 40.000 millones de pesetas.

Además del nuevo impuesto, los derivados del petróleo proporcionarán al Estado en 1984, sin contar la renta, unos 360.000 millones de pesetas, de los cuales cerca de 90.000 corresponderán a la última subida, que fue calculada para que costara a los consumidores 142.00 millones de pesetas adicionales. De la factura que pagará el consumo en el presente ejercicio, 1,18 billones de pesetas irán a las refinerías para pagar su actividad y las compras de crudos. Un tercer capítulo serán los gastos de distribución, con 132.000 millones.

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