Un submarino vendido por la RFA a Chile hunde un barco danés y causa tres muertos

Antes de entrar en servicio, durante un viaje de pruebas en aguas danesas, un submarino tipo Simpson, construido en la República Federal de Alemania (RFA) y vendido a Chile, hundió a un barco pesquero danés, en el que perecieron tres pescadores.Los portavoces del Gobierno federal alemán se arrojaban ayer unos a otros la patata caliente del accidente. El Ministerio de Defensa afirmaba: "Ninguno de nuestros barcos estaba en la zona. No es asunto nuestro". El portavoz del Gobierno, secretario de Estado Peter Boenisch, prometió,en conferencia de prensa, informarse del caso, pero por la tard...

Antes de entrar en servicio, durante un viaje de pruebas en aguas danesas, un submarino tipo Simpson, construido en la República Federal de Alemania (RFA) y vendido a Chile, hundió a un barco pesquero danés, en el que perecieron tres pescadores.Los portavoces del Gobierno federal alemán se arrojaban ayer unos a otros la patata caliente del accidente. El Ministerio de Defensa afirmaba: "Ninguno de nuestros barcos estaba en la zona. No es asunto nuestro". El portavoz del Gobierno, secretario de Estado Peter Boenisch, prometió,en conferencia de prensa, informarse del caso, pero por la tarde su oficina informaba al Ministerio de Hacierida "que los responsables son los propietarios de los astilleros que construyeron el submarino". El portavoz del Ministerio de Hacienda no sabía nada, "está mucho dinero en juego y en la zona hay también submarinos rusos. Sólo los astilleros pueden informar directamente".

El submarino implicado en el accidente fue construido para Chile por la empresa Howaldtswerke-Deutsche Werk (HDW), de Kiel, que es propiedad, en tres cuartas partes, del Gobierno federal alemán. En Kiel, los portavoces de la empresa se sumergieron.

Según informaciones procedentes de Dinamarca, el submarino de la HDW arrastró las redes y hundió en cinco minutos al pesquero. Un periódico danés calificó el suceso de "asesinato". Según informaciones recibidas por este periódico, no confirmadas oficialmente, el submarino implicado en el accidente estaba tripulado por civiles alemanes y comandado por un ale mán al servicio de la empresa HDW. Entre los tripulantes había un grupo de militares chilenos, que recibía las primeras instrucciones sobre su funcionamiento. La venta de este submarino a Chile, y otro más del mismo tipo, había provo cado fuertes polémicas en la RFA. La venta se acordó por el Gobier no social-liberal (SPD-FDP) del canciller socialdemócrata Helmut Schmidt.