Los afectados del síndrome tóxico rechazan las altas médicas

La asociación de afectados del síndrome tóxico, de Valladolid, rechaza las altas médicas dadas a algunos de los enfermos que posteriormente han sido despedidos de sus empresas por no rendir como antes, según manifiesta en un comunicado hecho público y recogido por la Efe."Aún reconociendo la mejoría relativa que muchos experimentamos y ojalá fuese mayor", señala dicha asociación, "no estamos de acuerdo con las altas médicas que, de una manera más o menos solapada, a veces por órdenes de arriba, se nos están dando o se nos presiona para que aceptemos".

"Sufrimos" añaden, "una serie de se...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La asociación de afectados del síndrome tóxico, de Valladolid, rechaza las altas médicas dadas a algunos de los enfermos que posteriormente han sido despedidos de sus empresas por no rendir como antes, según manifiesta en un comunicado hecho público y recogido por la Efe."Aún reconociendo la mejoría relativa que muchos experimentamos y ojalá fuese mayor", señala dicha asociación, "no estamos de acuerdo con las altas médicas que, de una manera más o menos solapada, a veces por órdenes de arriba, se nos están dando o se nos presiona para que aceptemos".

"Sufrimos" añaden, "una serie de secuelas más ó menos graves, unos, y más o menos leves, otros. Lo cierto es que no estamos curados. Muchos de nosotros tenemos un estado fisico muy irregular, aparte de la incógnita que se abre sobre nuestro futuro. En muchos casos en que aparentemente nos creíamos bien, aparecen secuelas o se agravan antigüas enfermeda des y lesiones". Esta protesta de la asociación de de Valladolid se une a las que, por la misma causa, han expresado en días anteriores otras, asociaciones de afectados del síndrome tóxico. Durante el pasado fin de semana, según fuentes de estos enfermos, la protesta se ha generalizado. Aunque el Plan Nacional del Síndrome Tóxico no tiene confirmación al respecto, al parecer "se ha recrudecido la tensión entre los afectados por este problema laboral", según informaciones oficiosas que señalan también un "cierto malestar en el sector sanitario" que atiende a estos enfermos ya que se siente cogido en medio de la presión de los enfermos, que se resisten a las altas médicas, y de la falta de criterios oficiales sobre las presuntas secuelas.

En opinión de algunos afectados no es descartable la posibilidad de "nuevos encierros de duración indefinida hasta que la Administración decida resolver este tema".

Por otra parte, el Plan Nacional del Síndrome Tóxico última los preparativos para la reunión científica internacional que se desarrollará a finales de mes.

Archivado En