Cartas al director

Nicaragua y los sacerdotes

Ante las preocupantes noticias dadas por la Prensa sobre los incidentes ocurridos estos días en Managua (Nicaragua) como consecuencia de las relaciones entre sectores del Gobierno y de laPasa a la página 8 Viene de la página 7

jerarquía eclesiástica de ese país, las Comunidades Cristianas Populares de La Coruña queremos dar a conocer la carta que los jesuitas de Nicaragua han dirigido a los jesuitas de todo el mundo, con el fin de que se conozca públicamente y sirva para aclarar muchas noticias que llegan a la opinión pública manipuladas por las multinacionalesde la inform...

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Ante las preocupantes noticias dadas por la Prensa sobre los incidentes ocurridos estos días en Managua (Nicaragua) como consecuencia de las relaciones entre sectores del Gobierno y de laPasa a la página 8 Viene de la página 7

jerarquía eclesiástica de ese país, las Comunidades Cristianas Populares de La Coruña queremos dar a conocer la carta que los jesuitas de Nicaragua han dirigido a los jesuitas de todo el mundo, con el fin de que se conozca públicamente y sirva para aclarar muchas noticias que llegan a la opinión pública manipuladas por las multinacionalesde la información, por lo que le rogamos su publicación en EL PAIS encarecidamente.

"Queridos hermanos:

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
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En múltiples ocasiones durante estos años, diríamos en todo el tiempo, nos han acompañado con su interés, su oración y su solidaridad, manifestada de múltiples formas, ante las desgracias y álegrías que en estos años han hecho historia de esta provincia nuestra de Centroamérica.

Nos aflige, como a ustedes, la situación de los pueblos hermanos de Guatemala y El Salvador; con ustedes pedimos porque pronto, muy pronto, consigan una paz basada en el amor y la justicia.

Hoy queremos hacerles llegar nuestra voz desde este pueblo nuestro de Nicaragua, que había conquistado ya con suficiente dolor y heroísmo el derecho a esa paz y a levantar una patria nueva sobre nuevas bases de amor, igualdad y justicia.

Creemos que esto es aún posible, y es la aspiración del pueblo y Gobierno de Nicaragua. Sabemos, como también lo admiten los líderes de esta joven revolución, que se han cometido algunos errores y abusos. Pero, a la par de ello, hay una trayectoria sembrada de realidades, de búsqueda sincera por establecer un nuevo orden en favor de los más pobres y marginados de nuestra historia. Y ese esfuerzo es el quecreemos merece el apoyo de todos.

Sin embargo, ustedes están pudiendo comprobar la campaña propagandística que el Departamento de Estado de Estados Unidos y su propio presidente han ido orquestando en estos meses con la clara intención de propiciar, de una u otra forma, una intervención en Nicaragua, mientras se Inonta, por otro lado, otra campaña de ataques a nuestras fronteras y dentro del territorio por bandas armadas y sabotajes con claro intento desestabilizador. Los ya numerosos muertos del Ejército y milicia nicaragüenses. son la triste y real prueba de que estas cosas no son meros inventos.

Nicaragua no quiere la guerra. Ya hemós tenido suficiente de ella. Quiere la paz con todos para poder construir sobre ella su ideal de justicia social que asegure a todos sus hijos un futuro promisorio.

En todo el mundo, y en el mismo Estados Unidos, es cada vez más patente la conxprensión de esta realidad, de esta necesidad.

Pedimos a nuestros hermanos jesuitas de todo el mundo su oración y cuanto apoyo puedan brindarnos para que esta verdad sea más y más conocida, y la solidaridad y comprensión internacional hagan posible esa paz en libertad y dignidad que Nicaragua anhela.

Unidos en la oración y la esperanza en Jesús, nosotros, en Nicaragua, apoyamos las medidas de emergencia, con las cuales nuestro pueblo, se siente más fuerte para afrontar un conflicto que no queremos y que nos amenaza en forma de invasión.

Y si esto sucediera, lo cual pedimos a Dios que no ocurra, entonces necesitaríamos el apoyo fuerte de todos ustedes manifestado en campañas de solidaridad, ayuda de todo tipo. Rezamos para que no llegue ese momento, pero si viene no dejen solo a este pueblo, a cuyo servicio hemos puesto nuestras vidas. A su vez, este pueblo sabrá defender sus conquistas.

Sus hermanos de Nicaragua:

Por el Consejo Nacional de la Compañía de Jesús, Richard Vélez R., S J.; Alvaro Argüello M, S. I; Valentín Martínez, S. J.; Juan R. Moreno, S. J.; Francisco Javier Llasera, S. J.".

Gracias por su publicación./ Comunidades Cristianas Populares de La Coruña.

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