El Gobierno vasco mantiene su decisión de llevar adelante el proyecto de la central

La voluntad de continuar con el proyecto de Lemóniz, a pesar del clima de inseguridad que se ha creado en el ámbito de los técnicos de la mencionada central, es uno de los objetivos prioritarios del Gobierno vasco. Los representantes del Gabinete de Carlos Garaikoetxea guardaban ayer un hermetismo total en relación a las medidas concretas a adoptar para garantizar la continuidad de las obras de la central nuclear y se remitían a la reunión que mañana miércoles mantendrán en Madrid el ministro de Industria, Ignacio Bayén, el consejero vasco Javier García Egotxeaga y el presidente de la empresa ...

La voluntad de continuar con el proyecto de Lemóniz, a pesar del clima de inseguridad que se ha creado en el ámbito de los técnicos de la mencionada central, es uno de los objetivos prioritarios del Gobierno vasco. Los representantes del Gabinete de Carlos Garaikoetxea guardaban ayer un hermetismo total en relación a las medidas concretas a adoptar para garantizar la continuidad de las obras de la central nuclear y se remitían a la reunión que mañana miércoles mantendrán en Madrid el ministro de Industria, Ignacio Bayén, el consejero vasco Javier García Egotxeaga y el presidente de la empresa eléctrica, Manuel Gómez de Pablos. Por su parte, Iberduero no ocultaba su intención de proceder al cierre temporal de las obras.Mientras los técnicos de la central nuclear de Lemóniz daban a conocer ayer su decisión de abandonar sus puestos de trabajo, el Gobierno vasco -que trató el contencioso de la mencionada central como punto estelar en su reunión habitual del Consejo- guardaba un mutismo total. Aunque hoy dará a conocer un comunicado en el que manifestará su voluntad de continuar adelante con el proyecto de Lemóniz, los representantes del ejecutivo autónomo se limitaban a decir ayer a este periódico que "no hay comentarios al respecto".

Todas las posibilidades se están barajando desde que se intensificaron los contactos entre los afectados a partir del momento en que ETA Militar asesinó al ingeniero jefe del proyecto, Angel Pascua¡ Mújica. Desde la militarización, pasando por la negociación con la organización terrorista, la continuidad de las obras o el cierre temporal de las mismas, son cartas que están siendo contempladas desde los diversos flancos de la negociación.

La intención de que el proyecto energético prosiga es un objetivo que figura en las prioridades del Gobierno vasco, que en los actuales momentos está pensando en las medidas adecuadas a llevar a cabo para que Lemóniz no sucumba.

Aunque el Ejecutivo da por sentado que no puede ofrecer una garantía total a los técnicos en relación a su seguridad personal, piensa, acaso por razones de prestigio, que el proyecto nuclear debe continuar en el plazo más breve posible.

En la tarde de ayer el grupo parlamentario de Euskadiko Ezkerra solicitó un pleno extraordinario de la cámara autónoma para debatir el futuro de la central nuclear de Lemóniz. De acuerdo con la petición del mencionado grupo, el único punto del orden del día a tratar sería la discusion sobre una comunicación del Gobierno Vasco relativa a la situación creada en la construcción de la central tras el asesinato del ingeniero Angel Pascual Múgica. Euskadiko Ezkerra plantea la necesidad de celebrar un referéndum como solución.