Discriminación contra Ensidesa en el reparto del mercado nacional, según un informe del PCE

El secretario regional del PCE-PCA, Gerardo Iglesias, ha tomado la iniciativa de invitar, con carácter de urgencia, a todas las fuerzas políticas, sindicales y empresariales asturianas a una reunión para estudiar conjuntamente la grave situación que atraviesa Ensidesa, la principal empresa asturiana, en torno a la cual Comisiones Obreras ha programado una campaña de movilizaciones, a la que sé sumó UGT.La dirección del Partido Comunista de Asturias entregará en la citada reunión un documento elaborado a partir de las memorias de la empresa nacional siderúrgica y del informe de la firma japones...

El secretario regional del PCE-PCA, Gerardo Iglesias, ha tomado la iniciativa de invitar, con carácter de urgencia, a todas las fuerzas políticas, sindicales y empresariales asturianas a una reunión para estudiar conjuntamente la grave situación que atraviesa Ensidesa, la principal empresa asturiana, en torno a la cual Comisiones Obreras ha programado una campaña de movilizaciones, a la que sé sumó UGT.La dirección del Partido Comunista de Asturias entregará en la citada reunión un documento elaborado a partir de las memorias de la empresa nacional siderúrgica y del informe de la firma japonesa Kawasaki.

En síntesis, el PCA propondrá a los demás reunidos asumir la solicitud del cese de la supuesta discriminación que supone para Ensidesa el reparto de mercados fijado para 1982.

Este reparto supone, según la misma fuente, asignar a Ensidesa el esfuerzo exportador del sector al tiempo que se reserva el mercado nacional a las empresas privadas. Como dato significativo señala que a Altos Hornos de Vizcaya le han sido asignadas al mercado nacional un 83% de sus producciones frente al 61% de Ensidesa. También pide el PCA la utilización en plano de igualdad del potencial de las respectivas instalaciones acabadoras.

Ensidesa es la única siderurgia española que ha reducido su producción de acero desde 1974, período hasta 1982 que registra, pese a la recesión del mercado, un notable incremento del acero no integral producido por las empresas privadas.

Entre tanto, Ensidesa cerró sus instalaciones de cabecera y laminadoras en las factorías de Mieres, Moreda, Gijón y La Felguera con la parada de un tren estructural, uno de alambre, uno de fleje, dos de chapa, un horno eléctrico y un alto horno.

Por otra parte, el Partido Comunista de Asturias estima que la Administración priva a Ensidesa de concurrir en el mercado en condiciones de igualdad con la siderurgia privada, tanto integral como no integral, y trata de especializarla en producciones de baja rentabilidad y con escasas perspectivas de mercado como es el caso de los productos largos.

El informe comunista considera evidente que la siderurgia española carece de la suficiente capacidad de producción de acero frente a sus posibilidades de cabecera (coque, arrabio y sinterizado) y transformación (laminados) con un cuello de botella en la falta de acerías.

El hecho de que los cuatro hornos altos de Avilés sean con el de Veriña-Gijón los únicos de España a nivel europeo, aconseja la instalación de una nueva acería con coladas continuas y un tren de bandas en caliente en Avilés, agrega el citado informe.

El PCA concluye que Ensidesa, única empresa siderúrgica española verdaderamente integral, está en mejores condiciones que ninguna otra por su modernidad, productividad, y menores pérdidas sobre facturación para alcanzar los objetivos de eficacia y de competitividad exigidos por los mercados internacionales, mediante la ampliación de su capacidad de transformación y, concretamente, de la producción de laminados planos.